El jugador pudo participar con normalidad, pero el técnico no quiso forzar la máquina en el entrenamiento de la tarde cuando lo situó de hombre libre en un partido de reducidas dimensiones para que siempre atacara y no tuviera que defender. Fue la manera de librarse de golpes en su tocado tobillo derecho.

Del Bosque cuida a Busquets en la doble sesión de la Roja (leer noticia)