GOL A GOL

Solo fútbol

Xavi Torres

 La clasificación del Barça para las semifinales de la Copa del Rey en Málaga sólo hacen que confirmar la grandeza de este grupo de jugadores irrepetibles que, a base de fútbol, cierra todos los debates que se abren una vez tras otra, caso tras caso: después de la noticia de la no renovación de Valdés, respuesta contundente; tras el terremoto 'Milan', titularidad y gol de papá Piqué; tras las nuevas hospitalizaciones de Tito Vilanova y Abidal, doble motivación. El vestuario del Barcelona es tan futbolero que el ruido que irremediablemente les acompaña por el gran seguimiento de su profesión, venga de donde venga, les sobra. El césped es su hábitat y los debates se discuten ahí. El próximo está a la vuelta de la esquina porque en cada duelo con el Real Madrid hay muchos temas para comentar, sobre todo ahora que el coloso está en llamas: el presidente, Florentino Pérez contra las cuerdas; Jose Mourinho, a un paso de la decapitación, los capitanes, en el punto de mira de su entrenador; la plantilla, rebotada y la afición, girada. Los jugadores madridistas, tras pasar el síndrome de Estocolmo, han llegado a las mismas conclusiones que el resto de los humanos que no vivían bajo la presión del técnico portugués. Sin embargo uno tiene la impresión de que en la casa blanca hay quien ha fallado su estrategia y que estos tres años de 'mourinyismo' han sido un fracaso. La plantilla del Real Madrid es tan extraordinaria, Ronaldo, Higuaín, Ozil y compañía son tan buenos que da la impresión de que todos ellos, por culpa de su entrenador, del ruido que ha provocado, de las batallas contra el mundo, de los planteamientos asustadizos y de las excusas variadas y repetitivas hasta el aburrimiento general; por todo eso y por mucho más, todas esas estrellas han perdido grandes oportunidades para conseguir más éxitos. Volvemos al inicio: el Real Madrid, como el Barça, sería mucho mejor si volviera a pensar sólo en el balón. Por cierto, mañana más, a las siete y en el Estadi, Barça-Osasuna. Solo fútbol.