Rubén Fernández, nuevo líder, con Froome marcando territorio

El último kilómetro de la tercera etapa de la Vuelta a España, en el Mirador de Ézaro, fue trepidante: ataque de Movistar, con Rubén Fernández al frente tirando de Nairo Quintana y Alejandro Valverde, cede Alberto Contador y remontada de Chris Froome, dejando claro que, para doblegarle, habrá que sudar y mucho.

El francés Alexandre Geniez (FDJ) se impuso en la primera llegada en alto de esta Vuelta. Se unió al cuarteto que había lanzado la primera escapada (y única) y que llegó a disponer de casi siete minutos de ventaja sobre el pelotón.

Pero los favoritos sabían que, con pendientes de hasta el 30 por ciento hacia el final de la etapa, disponían de una oportunidad de oro para intentar marcar diferencias. Por eso Movistar, junto con Orica, han tomado las riendas.

En el último kilómetro, 'hachazo' de Movistar, con Rubén Fernández al frente. Le siguieron sus compañeros Quintana y Valverde, así como Alberto Contador (Tinkoff). Se quedaba Chris Froome.

Pero el de Pinto pronto se ha visto descolgado de ese grupo por el intenso ritmo que imprimía Fernández. Por contra, reaccionaba Froome, que pasó como una moto para rebasar a Contador y alcanzar a los dos hombres fuertes de Movistar.

El líder de Tinkoff cedió otros 28 segundos con respecto a sus grandes rivales y la diferencia con ellos en la general supera ya el minuto y medio (1'31").

La victoria, como hemos dicho, para Geniez. Segundo triunfo de etapa en la Vuelta a España para el francés. Pero lo celebró de igual forma Fernández, que se marchó en pos de la cima a toda máquina. "Por el pinganillo me dijeron que me ponía líder", explicó en los micrófonos de Tdp. El murciano, ganador del Tour de Porvenir, se enfundaba el maillot rojo de la Vuelta.

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