'Super Froome' en los Alpes

En vísperas de una cronoescalada fundamental Chris Froome demostró en la durísima ascensión a Finhaut Emosson que hoy por hoy ninguno de sus adversarios está en condiciones de discutir el maillot amarillo que luce. El británico, amparándose en su equipo Sky, 'fundió' literalmente a todos sus adversarios mientras que Ilnur Zakarin se convirtió en el héroe de la decimosétima etapa.

El ruso del equipo Katusha fue capaz de reaccionar tras la bajada de la Forclaz, donde Pantano y Majka habían cobrado unos metros de ventaja y se relevaban a la perfección. Zakarin siente pánico a los descensos porque en el pasado Giro sufrió una dramática caída en la que perdió el conocimiento y se fracturó una clavícula bajando el Agnello. A pesar de ello el ruso les dio alcance al final de la bajada y les remató en la durísima ascensión final, con un nueve por ciento de desnivel sostenido. Zakarin había formado parte de una violenta escapada inicial de 11 corredores a la que posteriormente se sumaron ocho más.

El equipo Movistar recibió un importante revés durante esta jornada ya que Gorka Izaguirre se vio envuelto en una caída masiva al poco de comenzar la etapa y tuvo que retirarse con una fractura de clavícula. Su baja se sumó a la de Jesús Herrada. A pesar de esta situación la formación española intentó mover la carrera pero los Sky de Chris Froome no mostraron la menor fisura. Poels y Nieve estuvieron siempre pegados a su líder, marcándoles el pulso de la carrera a un ritmo que no permitía ataques de sus adversarios. Y a pesar de ello, Alejandro Valverde, quinto en la clasificación general, se inmoló después de que los intentarán los Astana con Nibali, Rosa y Aru, para intentar favorecer un ataque de su compañero y jefe de filas, Nairo Quintana. 

A menos de 3 km. un contrataque de Richie Porte hizo que Nairo intentara seguir su rueda, pero Poels llevó al maillot amarillo hasta el último kilómetro. Atacó Froome en persona para soldarse al australiano mientras que el colombiano mostraba su impotencia y tenía que refugiarse en el grupo de Fabio Aru y Yates. Quintana cedió otros 28" ante Froome en un terreno en donde el colombiano tenía que mostrar su superioridad. 

El gran derrotado fue el norteamericano Tejay Van Garderen, que sufrió un desfallecimiento en La Forclaz y perdió cualquier posibilidad de terminar en el 'top ten'. Bauke Mollema vio recortada su ventaja sobre Yates y también peligra su segundo puesto en la clasificación general.  

La decimoctava etapa consta de una cronoescalada de 17 Km. entre Sallanches y Mègeve.