DIRECTO A GOL

Los equipos que entran en la historia

Toni Frieros

Dicen que no hay gloria sin sufrimiento. Y añadiría que tampoco sin belleza. Las grandes obras y las grandes gestas se recuerdan por la emoción que provocaron. Y digo esto porque ganar a cualquier precio, cuando el fin justifica los medios, no te asegura entrar en la historia y, lo que es más importante, tampoco ser recordado.

No tengo ni idea si el Chelsea de Mourinho ganará esta edición de la Champions League o no. Lo que sí tengo claro es que, como amante del fútbol, si fuera seguidor del Chelsea no estaría orgulloso del juego de mi equipo.

Cada entrenador tiene todo el derecho del mundo a jugar como le dé la gana, faltaría más, pero por esa misma razón los aficionados también tenemos el derecho a decir que es una vergüenza que un equipo construido a golpe de talonario, que está en la élite del fútbol mundial, ofrezca la imagen que ofreció el Chelsea en el Vicente Calderón. Minuto 15; Petr Cech se hace con el esférico. El jugador del Chelsea que está más lejos se encuentra en el círculo central. El meta checo saca todo lo fuerte que puede y el balón llega a manos de Courtois. ¡El Chelsea no quiere el esférico, lo regala! Vivir del error ajeno y no de la virtud propia es feo, pero allá cada cual.

Seguro que ni Mourinho ni el Chelsea buscan admiración alguna. Con partidos como el del martes, seguro que nadie les recordará. Incluso si, jugando así, ganan la Champions.