TENIS - DOHA 2016

David Ferrer se despide en su debut

David Ferrer no podrá defender su título en Doha tras caer frente al ucraniano Illya Marchenko, 94 del mundo, por 6-7 (8/10), 6-3 y 6-2 en dos horas y 17 minutos

David Ferrer cayó en Catar

Ferrer no pudo contro el ucraniano Illya Marchenko / sport

Neus Yerro

David Ferrer se ha despedido del torneo de Doha a las primeras de cambio. El defensor del título ha dado una imagen poco habitual en él ante un rival, el ucraniano Illya Marchenko, que llegaba al torneo sin saber lo que era ganar un set a un 'top 10'.

Ahora no sólo lo sabe... Marchenko incluso sabe lo que significa ganar un partido a un tenista del grupo de elite tras imponerse por 6-7 (8/10), 6-3 y 6-2 en dos horas y 17 minutos.

Marchenko, 94 del mundo, ha apostado por el riesgo (39 winners por 45 errores) para intentar desbordar a un tenista como Ferrer que, si por algo se caracteriza, es por su solidez.

Pese a la buena imagen ofrecida en la exhibición de Abu Dhabi ha quedado patente que el jugador de Xàbia todavía no se ha adaptado por completo a su nueva raqueta (esta temporada ha decidido cambiar de Prince a Babolat), como demuestran sus 9 dobles faltas y la infinidad de errores cometidos (hasta un total de 43 por apenas 13 golpes ganadores). Aunque 'Ferru' le tiene "fe a esta raqueta, sé que me va a ayudar".

Ferrer siempre ha ido a remolque. Marchenko ha llegado a servir para anotarse la primera manga (5-4) pero en ese momento los nervios le han traicionado. Le ha vuelto a suceder en el 'tie break', que dominaba por 5-1, para acabar cediéndolo por 10/8.

Pero el ucraniano no se ha venido abajo. Al contrario. Pronto se ha situado con ventaja en el segundo parcial (4-1). Y esta vez no la soltado. Como tampoco ha hecho en el tercer set. Una derecha ganadora ha dictado sentencia.

"Las cosas pasan porque tienen que pasar. Lo ha buscado y ha sido el justo ganador", ha admitido un Ferrer que ha confesado haber llegado a Doha "muy cansado. Me ha costado ponerme. No he estado a la altura ni física, ni mental, ni tenísticamente. Tengo mucho que mejorar".

Marchenko era la cara de la moneda. Feliz es poco. Pero no podrá disfrutar de esa felicidad como él desearía. "Es un día fantástico y un modo increíble de iniciar la temporada. Pero el próximo partido (este miércoles) llega demasiado pronto. Seguir tranquilo y concentrado tras una victoria como ésta no es fácil", ha dicho antes de su duelo con el ruso Teimuraz Gabashvili.