Albert Ramos lo volvió a hacer... ¡y es semifinalista en Montecarlo!

Albert Ramos está viviendo su semana grande. Este sábado se estrenará en las semifinales de un Masters 1000 en Montecarlo y lo hará con sus dos primeras victorias consecutivas sobre sendos 'top 10': Andy Murray (1), en octavos y el croata Marin Cilic (8), en cuartos. Triunfo del tenista catalán por 6-2, 6-7 (5) y 6-2 en dos horas y 32 minutos de partido.

Como en el encuentro anterior frente al escocés, Ramos ha tenido que seguir creyendo en sí mismo y buscando sus opciones hasta el final. Porque ha tenido que remontar después de que el partido se le pusiera muy de cara con el marcador favorable por 6-2 y 5-4 y con servicio para ganar. En ese momento, la tensión ha pasado factura, lo que ha permitido a Cilic volver al duelo.

Albert tenía muy claro su esquema de juego: siendo zurdo, podía incidir una y otra vez en el revés de Cilic al que se ha visto incómodo prácticamente durante todo el encuentro (salvo en la fase en la que ha ido por delante en el marcador).

Además, el saque no le funcionaba al croata (sólo un 49% de primeros servicios y un pobre 40 por ciento de puntos ganados con segundo servicio), lo que condicionaba en exceso su juego de ataque. Sin embargo Marin no ha renunciado a su estilo arriesgando la mayoría de las veces en exceso (57 errores por 28 de Ramos).

Sólo el momento de duda o de ser consciente de que tenía en sus manos el pase a sus primeras semifinales de Masters 1000 hizo temer que quizá Albert había dejado escapar su gran oportunidad.

Tras perder su saque, en el décimo juego del segundo set, la decisión ha acabado recayendo en un 'tie break' en el que Ramos ha estado a dos puntos del triunfo (5/4). Pero tres puntos consecutivos de Cilic, el último, una volea profunda que por poco no se ha marchado fuera, han alargado la contienda.

Parecía que el golpe, esta vez sí, había hecho mella en el tenista de Mataró. El croata se situaba con 2-0 y disponía incluso, de una oportunidad de colocar el 3-0 con un segundo 'break'.

Luchó como un jabato Albert y, a partir de ahí, volvió a imponer su ritmo y sus golpes como en la primera manga. Seis juegos consecutivos y otra victoria que le sitúa en semifinales y le permitirá escalar posiciones en el ranking ATP. 

Ahora espera al vencedor del duelo entre el francés Lucas Pouille y el uruguayo Pablo Cuevas, verdugo de Stan Wawrinka.