Lopetegui se vuelve a mantener invicto in extremis

La etapa de Julen Lopetegui como seleccionador se mantiene inmaculada. En Inglaterra ya resacató un empate en el último suspiro y el equipo español volvió a evitar la derrota en el tramo final en el partido ante Colombia gracias a un cabezazo de Morata.

El inicio de España fue prometedor. Iniesta y Silva se hicieron con el control del partido y la Roja marcó el ritmo. En pleno dominio inicial, Silva tuvo una clara ocasión, pero su triple intento fue despejado por Ospina. España era mejor de medio campo para arriba, pero atrás sufría. La posición de James, jugando entre líneas, estaba fuera de control y de sus botas partió el peligro colombiano.

Piqué sufría para controlar a Falcao, quien fue víctima de un claro penalti, pero el fuera de juego del delantero evitó que el colegiado lo pitara. España presionaba arriba y cuando recuperaba, hilvanaba jugadas rápidas, aunque cuando Colombia pasaba esta línea, llegaban los problemas.

Pedro, en forma

El éxito de la presión de España tenía mucho que ver con el estado de forma de Pedro. El tinerfeño está como un tiro y, en ataque, con chispa. Un zurdazo suyo estuvo cerca de significar el primer gol. La Roja subió el pistón a medida que Illarra se pegaba a James y le impedía jugar tan cómodamente y llegó el gol. Primero, Iniesta sufrió una fuerte patada en la rodilla de Aguilar, pero la jugada siguió, Pedro se fue por la banda y su centro fue rematado por Silva al primer palo. La pelota entró, pese a los intentos desesperados de Ospina de tocar el balón.

El gol dio aire a España y Aspas acarició el segundo con una frivolidad de tacón. A partir de entonces, el partido se endureció con entradas feas de los colombianos y un rifirrafe entre Cuadrado y Alba. Los nervios se contagiaron a la defensa de España. Piqué y Azpilicueta no se entendieron, Reina salió mal y Cardona aprovechó el regalo para marcar.

Segundo fallo de Reina

Fue un jarro de agua fría antes de llegar al descanso, del que el equipo no se recuperó en la reanudación. Silva e Iniesta se quedaron en la caseta y al equipo le costó arrancar. El desconcierto se plasmó en otra cantada de Reina en un córner, que Falcacó transformó en el segundo gol de cabeza.

España trató de reaccionar al ritmo de Asensio y Ospina evitó el empate volando a un lanzamiento de Koke. La entrada de Deulofeu por Piqué condujo a una defensa de tres, con Azpilicueta, Nacho y Monreal, para ganar más poder ofensivo. La fórmula no dio muchos resultados, excepto con algún centro buscando a Morata, que fue la referencia sustituyendo a Aspas.

El delantero del Madrid fue precisamente el salvador de la Roja con un perfecto cabezazo cruzado tras un centro de Monreal. La fe del equipo de Lopetegui permitió mantener la racha y jugar el partido del domingo en Macedonia, clasificatorio para el Mundial, con más confianza.