TENIS - ROLAND GARROS

Roland Garros se blinda contra los amaños

Roland Garros, que el año pasado generó 23,4 millones de euros en apuestas, ha reforzado el dispositivo para detectar partidos amañados. Usar Periscope está prohibido

Roland Garros ha reforzado las medidas para luchar contra la corrupción

Roland Garros ha reforzado las medidas para luchar contra la corrupción / AFP

Neus Yerro

Roland Garros no quiere que se repita el revuelo del Open de Australia sobre amaños que destaparon la BBC y BuzzFeed News. Por eso ha decidido reforzar la vigilancia sobre los partidos que se disputen.

El segundo Grand Slam de la temporada generó 23,4 millones de euros en apuestas en 2015 y por ello, la organización desea "que se vea que tenemos tolerancia cero", apunta el director del torneo, Guy Forget.

"Potencialmente, el tenis puede ser a la corrupción lo que el ciclismo es al dopaje", declara una fuente próxima a la Federación Francesa de Tenis (FFT), convencida de que los amaños pueden ser más habituales en el circuito que los controles positivos.

Aunque es más complicado que se arreglen resultados en un Grand Slam que en un 'challenger' o un 'future' (las categorías inferiores del circuito) es en las grandes citas donde más se invierte en esta materia. 

Durante el torneo un equpo de cuatro personas supervisan la vigilancia, junto a la Autoridad de Regulación de Juegos en Línea (Arjel), la policía y la Tennis Integrity Unit (TIU), el organismo independiente creado para luchar contra la corrupción en el circuito. Cada apuesta que supera los 5.000 euros genera una alerta. Sabedores de que el peligro puede llegar desde cualquier rincón del planeta, también se controlan las apuestas en el extranjero.

Este año la Federación ha prohibido las apuestas en las dos primeras rondas de la fase previa y en los dobles no podrá apostarse hasta los cuartos de final. Y es que el año pasado Roland Garros generó 23,4 millones de euros en apuestas... ¡un 52 por ciento más que en 2014!

Hay gente en la grada informando del resultado de un partido al instante. Eso ofrece dos o tres segundos de ventaja a los apostadores, tiempo más que suficiente para dar el 'sablazo'. Y cada vez los sistemas que usan son más sofisticados: ya no usan móviles sino dispositivos que se ponen bajo la ropa, con los que transmiten la información (por ejemplo, un botón en la rodilla derecha para los puntos ganados por un jugador, uno en la rodilla izquierda para el punto del rival).

Algunos partidos tienen un seguimiento especial porque alguno de sus jugadores figura en una 'lista negra'. Para analizar posibles sospechas, la FFT cuenta con un grupo de ex jugadores para que les indique si han visto alguna actitud fuera de lo común

Y, con el mundo de las redes sociales a máximo rendimiento, Roland Garros ha prohibido una de las aplicaciones más populares a día de hoy: no está permitido el uso de Periscope en las pistas del Bois de Boulogne. Se informa a los aficionados en las entradas y si alguien es 'cazado' se le advierte que no puede grabar... si insiste, incluso pueden obligarle a dejar la instalación.

¿Cómo controlar a las casi 35.000 personas que pasan a diario por las pistas? "A través del flujo a la fuente. Tenemos mecanismos para cortarlo. No es lo mismo que alguien esté dos horas y media filmando un partido de Rafa Nadal que lo haga en dos o tres momentos puntuales y durante un corto período de tiempo", explica Georgina Loth, directora adjunta en la Dirección de Medios y Producción del torneo. Chocan, además, con un problema de derechos de televisión, que pagan muchísimo dinero por ofrecer las dos semanas de competición.

Por el momento, no se han encendido las alarmas. Pero Roland Garros sigue vigilante...

La TIU sólo ha recibido dos alertas en Roland Garros en los últimos seis años. Una en 2010 y otra un año más tarde. No prosperaron.