Figo, Van Praag, Al-Hussein y Champagne serán sus rivales

Blatter contra todos

A la espera de la proclamación oficial de las candidaturas, la aparición de varios aspirantes se contempla como una ventaja para el actual presidente

Joseph Blatter

A sus 78 años y tras 17 en el cargo, Blatter quiere seguir al frente de la FIFA / sport

Jordi Blanco

Con la práctica seguridad de la retirada de David Ginola en la carrera por la presidencia de la FIFA y a la espera de que el ocho de febrero la comisión ética del ente rector de a conocer oficialmente la lista definitiva de candidatos, la carrera se inició ya con cuatro aspirantes a apartar del cargo a Joseph Blatter, quien a sus 78 años aspira a un quinto mandato... Para el que es favorito absoluto.

Jérome Champagne, ex vicesecretario general del organismo, fue el primero en dar a conocer su candidatura y poco después se sumó el príncipe jordano Ali bin Al-Hussein, vicepresidente de la propia FIFA y cuyo anunció ya despertó la sensación de que la proliferación de rivales era una ventaja para el actual presidente. Y en ese sentido, la entrada en escena del presidente de la federación holandesa Michael van Praag y del ex jugador profesional Luis Figo no ha hecho otra cosa que aumentar esa sospecha.

Sin embargo, la votación final podría reducir el nombre de aspirantes a partir del anuncio de Van Praag, que podría llevarse prácticamente todos los apoyos en Europa a los que podían aspirar Champagne y Al-Hussein. Para validar las candidaturas se precisa el aval de cinco federaciones nacionales y la UEFA, donde Blatter tiene mayor oposición, podría volcarse por expreso deseo de Michel Platini en un solo nombre: Van Praag o Figo.

Ni el carisma del ex futbolista portugués ni el apoyo que se contempla conseguirá en Europa Van Praag se contempla como suficiente para poner en entredicho la reelección de Blatter, quien hace una semana recibió la promesa de voto de las 54 federaciones africanas y cuenta con el respaldo también absoluto de las 46 asiáticas y las 11 de Oceanía. Para un total de 209 votos (uno por federación afiliada), la esperanza de contar con 111 apoyos ya le daría la reelección.

El dirigente suizo también entiende que tendrá un apoyo mayoritario entre las 35 asociaciones del Norte y Centroamérica que cerrarían las dudas que pudieran despertar algunas sorpresas. Y es que las federaciones nacionales no están obligadas a cumplir la recomendación de las Confederaciones, lo que provoca que tanto en África como en Asia pudieran desviarse algunos votos.