Vestuario dividido en el Real Madrid

El entorno madridista va claramente a por Rafa Benítez y está sacando a la palestra los trapos sucios del vestuario, aunque exageran en muchos casos. 

La realidad, en estos momentos, es que el vestuario del Madrid anda dividido por los métodos del técnico, aunque la gran mayoría aún está con él. La <strong>derrota abultada en el clásico ante el Barça</strong>, incluso, ha reforzado sus ideas dejando claro que este Madrid no puede alinear a todas las estrellas porque no defiende nadie. 

Existe una animadversión clara de dos futbolistas –Sergio Ramos y James Rodríguez– hacia el entrenador y sus grandes defensores son Kroos y Modric, que entienden y defienden la filosofía del entrenador madridista.

El mal rollo es evidente, aunque las <strong>quejas de Sergio Ramos</strong> y James Rodríguez no han arrastrado a sus compañeros. El central tiene una gran ascendencia sobre la plantilla y lleva tiempo enfadado con Rafa Benítez desde que le criticó públicamente. Además, se ha sumado su particular guerra médica para tirar con bala contra el técnico, que está defendiendo a capa y espada a los profesionales del club.

Pese a todo, el <strong>gran enfrentamiento es con James Rodríguez</strong>. Benítez está muy desilusionado con su rendimiento esta temporada y, sobre todo, con su actitud. Ha priorizado a la selección colombiana antes que al Madrid y el técnico le señaló directamente por su papel en el clásico...

James, sentenciado 

El colombiano ha aprovechado todas sus oportunidades para ‘rajar’ contra Benítez. Entiende que no le ha dado el rol de titular a pesar de ser uno de los galácticos y ante el Barça exigió jugar sí o sí. 

Los técnicos blancos habían preparado el encuentro sin el colombiano, que <strong>llegó muerto de los partidos con su selección</strong>, pero hubo presiones para que le alinease. 

Su actuación fue deplorable y Sergi Roberto y Rakitic le ‘pintaron la cara’ durante todo el partido. Sin duda, fue el gran señalado en la alineación de Benítez para el partido de Champions y lo normal es que purgue también ante el Eibar. Hasta que no coja nivel físico, James Rodríguez no jugará porque no está al nivel de sus compañeros..

Los grandes valedores de Benítez están en el centro del campo. Tanto Kroos como Modric ya llevan tiempo aquí y saben más que nadie que el Madrid no es un equipo competitivo si no tiene equilibrio.

Por ello aplaudieron ya de entrada las alineaciones de Casemiro, un futbolista que les permite a ellos dos crear más que destruir. El croata ya lanzó un mensaje a sus compañeros al acabar el clásico. “Si no estamos compactos, no somos un equipo. Cuando luchamos todos, somos muy buenos, pero sino nos pasan por encima”.

El croata se ha convertido en la gran mano derecha de Rafa Benítez dentro y fuera del campo y tiene claro que, para ganar títulos, no cabe la BBC y otro atacante más. Florentino Pérez se ha dado cuenta ahora y le va a dejar manga ancha a Benítez para que haga lo que considere oportuno y el técnico sentará a Benzema y James en muchos partidos.

Además, la relación de Cristiano Ronaldo y Rafa Benítez es mucho mejor de lo que se está comentando. El portugués respeta a Benítez y los técnicos están encantados con la actitud y profesionalidad del portugués. Otra cosa es Bale. El galés va por libre y no se integra ni se integrará. Apunta a otro gran fiasco galáctico de Florentino.