FINAL CHAMPIONS LEAGUE 2015/2016: REAL MADRID - ATLÉTICO DE MADRID

Real Madrid: Tres décadas de travesía del desierto

Treinta y dos temporadas estuvo el Real Madrid buscando la ansiada séptima Copa de Europa. Y cuando la conquistó, en 1997-98, la competición había cambiado, incluso, de nombre; era ya la Champions League

En 1981, el Madrid disputó la final de la Copa de Europa pero se quedó con la miel en los labios (izquierda). Tres veces llegó la `Quinta del Buitre¿ a las semifinales de la C1 pero nunca logró el título (derecha)

En 1981, el Madrid disputó la final de la Copa de Europa pero se quedó con la miel en los labios (izquierda). Tres veces llegó la ‘Quinta del Buitre’ a las semifinales de la C1 pero nunca logró el título (derecha) / sport

Toni Closa

Si tras lograr el pentacampeonato, el Real Madrid tardó sólo seis años en encaramarse de nuevo a la cima del fútbol europeo –perdiendo, en medio, dos finales ente Benfica (61-62) e Inter (63-64)- de ahí a su siguiente título tuvieron que pasar más de tres décadas. 

En esta larga travesía en el desierto, el conjunto blanco participó 16 veces en la competición decana (C1), 4 en la Recopa (C2) y 9 en la Copa de la UEFA (C3). Y quedó dos años fuera de Europa, en las campañas 1977-78, debido a su novena plaza en la Liga y 1996-97, tras quedar en sexta posición. Hasta 1977 era, junto al Barça, el único club que siempre había estado presente en los torneos continentales. Curiosamente, al año siguiente de su segunda ausencia, lograría la séptima corona continental.

De todos modos, en este ‘impasse’ en el máximo torneo sumó dos títulos, ambos en la Copa de la UEFA, en las temporadas 1984-85 y 1985-86, superando en la ronda definitiva, a doble partido, al Videoton húngaro y al Colonia. Y perdió tres finales. Dos en la Recopa, ante Chelsea (1970-71), en su debut en la competición- y Aberdeen (1982-83) y una en ‘su’ torneo, la de 1980-81, en la que fue batido por el Liverpool.

Metidos de lleno en las estadísticas, diremos que en estas 29 participaciones, amén de las referidas cinco finales, llegó a ocho semifinales (7 de la C1 y 1 de la C3). En el resto cayó siete veces en cuartos de final (3 C1, 2 C2, 2 C3), seis en octavos (5 C1, 1 C3) y en Copa de la UEFA, una vez fue eliminado en dieciseisavos y dos en treintaidosavos. El Real Madrid nunca llegó a jugar en la Copa de Ferias, ya que debutó en la tercera competición justo en la edición en que se convirtió en Copa de la UEFA. El PSV le amargó el estreno, apeándole en dieciseisavos por doble valor de los goles en campo contrario (3-1, 0-2).

Y regresamos a 1966, con el Madrid ‘ye-ye’ flamante campeón continental que, bajo la dirección técnica de Miguel Muñoz, ansiaba imponer su ley, de nuevo, en el fútbol continental. Pero, en los cuartos de final de la edición 66-67, el Inter de Helenio Herrera se tomó cumplida venganza de la eliminación de un año atrás en semifinales y apeó a los blancos. Luego caería en la final ante el Cetic. En la siguiente edición (67-68), un autogol de Zoco significó el adiós de los blancos ante el futuro campeón, Manchester United. En la 68-69, el verdugo del Real fue el Rapid de Viena, tras una polémica eliminatoria y en la siguiente campaña, el Standard de Lieja, en octavos de final.

Y se cerraba una época. Después de tres lustros de presencia ininterrumpida en la Copa de Europa, ya sea como ganador de la Liga doméstica o como vigente campeón del torneo, el Real -sexto en la Liga y campeón de Copa ante el Valencia- debería conformarse con acudir a la Recopa donde, en su primera participación llegó a la final, cayendo en el partido de desempate ante el Chelsea. En la siguiente temporada, como cuarto en la Liga, el club capitalino accedió a la flamante Copa de la UEFA, con el referido KO ante el Standard.

A partir de ahí, el Madrid fue combinando presencias en las tres competiciones y logró los dos citados triunfos en la Copa de la UEFA, que paliaron, en parte, su sequía en la Copa de Europa.

Las presencias en la primera competición fuero casi cíclicas. De 1975-76 a 1980-81 sólo dejaron de participar una temporada en la C1, la 77-78, en la que no se clasificaron para nada. Y llegaron dos veces a  cuartos, dos a semifinales y una a la final.

En 1975-76, tras eliminar el Borussia Moenchengladbach, campeón alemán, cayó en la penúltima ronda ante otro club germano, el Bayern que participaba como campeón vigente. Gerd Müller, que marcó en el Bernabéu y, por partida doble en el Olympiastadion, fue el verdugo de los blancos. El Brujas le apeó en la siguiente, en octavos y, en esta misma ronda, en 1978-79 sufrío una de las mayores humillaciones en la competición, cayendo ante el Grasshopper de Zurich.

Dura también fue la caida en la siguiente campaña, donde tras remontar un 2-0 ante el Celtic en cuartos se las tuvo que ver con el Hamburgo en semis. Dos goles de Santillana en casa parecían dejar el camino expédito hacia la final pero en el Volksparstadion, el conjunto hanseático le vapuleó, 5-1.

Un año después, al fin, los blancos lograron auparse a la final, tras unas duras semifinales contra el Inter. París y el Liverpool esperaban. Era el ‘equipo de los García’, más peleón que técnico, que dirigía Vujadin Boskov. Plantó cara a los ‘reds’ de Bob Paisley en un partido nada vistoso pero acabó perdiendo por culpa de un gol de Alan Kennedy, en el 82’. La séptima debía esperar.

LA QUINTA DEL BUITRE, TAMPOCO

Tras los dos títulos en la Copa de la UEFA, el Real participó cinco veces seguidas más (de 1986-87 a 1990-91) en la Copa de Europa. Era la Quinta del Buitre, que con los jóvenes canteranos Sanchís, Butragueño, Michel, Martín Vázquez y Pardeza como ‘santo y seña’ y otros cracks como Juanito, Camacho, Hugo Sánchez o Gordillo, dominó el fútbol español. Pero no logró el ansiado título continental. 

En las tres primeras campañas, los blancos llegaron a semifinales El Bayern fue el primer verdugo, en aquella eliminatoria recordada por el pisotón de Juanito a la cabeza de Matthaus. El 4-1 de la ida fue decisivo. El segundo, el PSV, que se impuso por el doble valor de los goles fuera. Y el tercero, el Milan, que le endosó un humillante 5-0 en San Siro. Ya vestía de blanco Schuster. Los ‘rossoneri’ volvieron a apear a los blancos, en octavos, en la siguiente edición y el Spartak de Moscú, en cuartos, en 1990-91. 

Ya como Champions, retornó a la primera competición en 1995-96 y, esta vez, cayó en cuartos ante la Juventus que remontó, con un 2-0, el 1-0 del Santiago Bernabéu. Dos temporadas después -y tras un año fuera de Europa- lograría, al fin, el objetivo.