El Real Madrid teme que la Eurocopa haga estallar una guerra de egos

Florentino Pérez y Zinedine Zidane, presidente y entrenador del Real Madrid, respectivamente, están muy pendientes de cómo se está desarrollando la Eurocopa. Ambos están siguiendo muy atentamente las evoluciones de los jugadores madridistas que la disputan y muy especialmente de cómo les va a los dos buques insignia del club, el portugués Cristiano Ronaldo y el galés Gareth Bale. El motivo de que les estén prestando tanta atención no es vanal. Todo lo contrario. Tanto Florentino Pérez como Zidane son muy conscientes de que la Eurocopa puede marcar un punto de inflexión y hacer estallar una nueva guerra de egos en el vestuario del Santiago Bernabéu.

Hace semanas que el club puso en marcha toda su maquinaria propagandística para promover la candidatura de Cristiano Ronaldo como próximo ganador del Balón de Oro. La conquista de la 'undécima' Liga de Campeones es el principal y único argumento que los voceros oficiales del club madridista están empleando para defender los méritos del crack portugués, ya que de momento, apenas ha dado señales de vida en la Eurocopa, como volvió a quedar de manifiesto en el partido de cuartos de final que la selección portuguesa disputó ante Polonia.

En el club madridista son conscientes de que el buen papel que está realizando hasta ahora Bale en la cita continental como líder de la selección galesa puede provocar un cortocircuito en el actual ecosistema de egos que hay en el vestuario madridista. Los responsables de la entidad blanca entran en pánico al pensar en la posibilidad de que la selección galesa se clasifique hoy para las semifinales, donde se vería las caras con Portugal.

el peor escenario

Ese sería el peor de los escenarios, porque en función de los que ocurriese en ese hipotético partido Bale podría convertirse en uno de los grandes rivales de Cristiano en la carrera por conquistar el Balón de Oro. Y tanto Florentino Pérez como Zidane saben que el portugués no soporta que ningún compañero le discuta su liderazgo. El vestuario madridista entraría en erupción. Hace unos días ya dio muestras de su frustración por las críticas que está recibiendo al lanzar al agua el micrófono de un periodista.

Salvo que el extremo portugués aparezca a partir de las semifinales, la realidad es que está siendo una de las grandes decepciones de la Eurocopa, ya que el protagonismo de Portugal está recayendo en Quaresma. La prensa europea está siendo muy dura a la hora de analizar su rendimiento en la cita francesa. 'La Gazzetta dello Sport', por ejemplo, describe su papel hasta el momento como de una mera "comparsa" y destaca que "sigue sin brillar" en la Eurocopa. Todo lo contrario que Bale, que esta noche tiene la oportunidad de convertirse en el héroe de Gales y en lanzar oficialmente su candidatura al próximo Balón de Oro. Un problema más para Florentino Pérez y Zidane.