Indignación en Balaídos con el arbitraje
Balaídos coreó el clásico "¡tongo! ¡tongo!¡tongo!" tras la discutida actuación del colegiado Martínez Munuera. La doble vara de medir del árbitro encendió los ánimos de una afición que vio un claro trato de favor hacia el Real Madrid.
El escándalo adquirió su mayor dimensión justo a mediados de la segunda parte, cuando Martínez Munuera mostró su inflexibilidad al expulsar a Iago Aspas con la segunda cartulina amarilla. El colegiado entendió que el delantero vigués simuló una caída en el interior del área buscando una posible pena máxima y le castigo con la tarjeta que le enviaba directamente al vestuario.
Unos minutos después, Cristiano Ronaldo fue indultado en una jugada idéntica en la que el portugués se tiró en un piscinazo.
La mofa de Balaídos se prolongó durante los minutos finales del encuentro. En varias acciones de choque y faltas sin mayor trascendencia, Martínez Munuera fue acompañado con el cántico de la grada pidiendo "¡otra! ¡otra!" en clara alusión al singular criterio para castigar con tarjetas amarillas al Celta y perdonar las madridistas.
Otro arbitraje tendencioso que la afición del Celta tardará en olvidar.
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