FC BARCELONA

La Fiscalía presenta el recurso contra el archivo del caso de Neymar y DIS

El fiscal José Perals insiste en que hubo corrupción en el caso Neymar ya que el Barça, para asegurarse su fichaje, "alteró el mercado de fichajes y la contratación"

Neymar Junior y su padre Neymar da Silva acudiendo a su comparecencia ante la Audiencia Nacional en Madrid

Neymar Junior y su padre Neymar da Silva acudiendo a su comparecencia ante la Audiencia Nacional en Madrid / sport

EFE

El fiscal insiste en que hubo corrupción en el pago de 40 millones del Barcelona a Neymar para asegurar su fichaje, ya que "alteró el mercado de fichajes y la contratación" porque ante una oferta mejor para el Santos como una del Real Madrid de 36 millones, "el jugador se decantó (...) por otra vía no permitida en el ámbito de la FIFA".

Este es uno de los argumentos que esgrime el fiscal José Perals en su recurso de apelación ante la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional contra la decisión del juez José de la Mata de archivar la causa abierta a Neymar, su padre, el expresidente del Barça Sandro Rosell y el propio club por el supuesto engaño sobre el precio del traspaso al fondo brasileño DIS, gestor del 40% de los fondos federativos del delantero.

El fiscal entiende que, si De la Mata admitió en el auto de archivo que Neymar y el FC Barcelona incumplieron "palmariamente las normas de la FIFA" por la entrega de esos 40 millones, "es evidente que no se pueden calificar tales hechos de meros incumplimientos éticos o morales" sino que son "unos claros indicios" de que ese pago es "un acto típico de corrupción en los negocios".

Recuerda que el precio real de mercado de Neymar no eran por tanto los 17,1 millones de euros fijados en el contrato, "sino una cantidad mayor, más próxima a los 36.000.000 euros ofrecidos por el Real Madrid".

Perals reprocha por ello a De la Mata que no tuviera en cuenta esa circunstancia a la hora de archivar también el delito de estafa cuando resultó acreditado que Neymar Jr. sólo quería jugar en el FC Barcelona, lo que si bien se debía a su voluntad, esta "lógicamente se veía influenciada por el hecho de que ese club le pagaba 40 millones".

Por ese delito, apunta Perals, se vieron perjudicados, no solo el fondo DIS, "sino también el propio Santos que veía como, incomprensiblemente para ellos, Neymar Jr. insistía en que solo aceptaba ser traspasado al FC Barcelona y a ningún otro, pues no sabían que Neymar había cobrado 40 millones de euros de dicho club".

No obstante, cree que el Santos no sufrió finalmente ese al haber percibido una cantidad superior a los 17 millones de euros del traspaso "a espaldas de la sociedad DIS", cantidad -12,4 millones de euros- que se entregó bajo la cobertura de otros contratos sin contenido real: el derecho de adquisición de tres jugadores y un partido amistoso.

A juicio del fiscal, estos contratos simulados, que perjudicaron al cobro de los derechos federativos que correspondían a DIS, son constitutivos de un delito de estafa impropia, por lo que también solicita que se procese al Santos.

Otro de los indicios que destaca Perals es que el Barça mantuvo oculto un documento -un anexo del contrato de traspaso- relativo al pago de sus derechos federativos que demostraría que hubo engaño al fondo brasileño DIS.

Este documento "intencionadamente ocultado y casualmente hallado", ya que el club evitó aportarlo al juzgado y apareció después entre los reclamados a la auditora Deloitte, "es importante a la hora de valorar la comisión del delito de estafa, pues revela por si mismo que los dos clubes (Barça y Santos) preveían la posibilidad de que DIS, en el futuro, podría reclamar más cantidad que la que se pactaba en el contrato principal".

"Su contenido es importante a la hora de valorar la comisión del delito de estafa, pues revela por sí mismo que los dos clubes -Santos y Barcelona- preveían la posibilidad de que DIS, en el futuro, podría reclamar más cantidad que la que se pactaba en el contrato principal", explica el fiscal

De la Mata acordó archivar esta causa el pasado 8 de julio, al considerar que los contratos de traspaso del jugador suscritos en 2011 y 2013-, si bien pueden tener "repercusiones deportivas, éticas y disciplinarias", no encajan en un procedimiento penal, por lo que recomendó a DIS reclamar por la vía civil.