REAL MADRID

El City espera un guiño de Isco para abordar su fichaje

El malagueño se gana con esfuerzo y talento la titularidad, pero no tiene un padrino en el club que apueste por él

Isco, en un partido de pretemporada ante el Inter

Isco, en un partido de pretemporada ante el Inter / sport

Alejandro Alcazar

Para Isco la vida sigue igual pese al cambio de entrenador. Benítez habló con él para explicarle su idea pero más allá de las buenas palabras no le prometió nada. El malagueño teme que su rol no vaya a cambiar respecto a la etapa de Ancelotti. Ha sido uno de los jugadores más destacados en lo que llevamos de pretemporada, feliz y acaparando los focos hasta que apareció James que volvió a robarle protagonismo. La presencia del colombiano y las pruebas de Benítez, que intenta encajar a la BBC dentro de sus esquemas aunque sea con calzador, son un mal augurio para el malagueño que reclama un sitio en el once titular a base de esfuerzo y talento. Una magia de la que carecen otros compañeros pero no tiene padrino en la planta noble y eso le hace infeliz. No el que no tenga padrino, sino que jueguen otros por decreto pese a rendir por debajo suyo.  

La desesperanza del malagueño es la esperanza de Manuel Pellegrini, Txiki Begiristain y Ferrán Soriano. Los ‘capos’ ejecutivos del Manchester City siguen al detalle la desazón que vive Isco en el Real Madrid. Son conscientes que las dudas del de Arroyo de la Miel no son económicas, sino deportivas. Si fueran económicas es posible que nunca hubiera fichado por el Madrid y que fuese ‘citizen’ desde hace tiempo. Isco persigue la titularidad como reconocimiento a su fútbol y, sobre todo, al esfuerzo que hace para transformar su juego y ponerlo al servicio del equipo, pero la presencia de los mimados galácticos –Bale, por ejemplo, no ha marcado un gol desde el 5 de abril pese a su condición de titular y delantero, al margen de que lleva meses sin conectar con el equipo–, y la competencia con James arruinan esa ilusión de convertirse en titular indiscutible.

Los ejecutivos del City han decidido esperar el guiño del malagueño, el “hasta aquí he llegado”, para abordar su fichaje sin tapujos y ofrecerle un sueldo mareante que el Madrid no podría pagarle para el estatuos que tiene en su plantilla. Su fichaje es para convertirle en el jugador franquicia del equipo, en el futbolista referente. Y no tienen prisa, esperan pacientes a que el jugador dé el paso conscientes que con presión no conseguirían nada.