REAL MADRID

Benítez se carga a Benzema

Benzema no está brillando en los partidos de pretemporada. El 4-2-3-1 no se adapta a sus condiciones

Benzema no ha brillado en los primeros partidos de esta pretemporada

Benzema no ha brillado en los primeros partidos de esta pretemporada / sport

Francesc Gimeno

El delantero francés Karim Benzema ha podido comprobar durante los primeros días de convivencia con su nuevo entrenador, Rafa Benítez, que su rol en el equipo ha cambiado de forma radical. Benzema apenas ha dado señales de vida en los cuatro amistosos disputados hasta ahora y la explicación hay que buscarla en el nuevo sistema táctico por el que ha apostado el técnico madrileño. El francés ha perdido el protagonismo que tenía con el 4-3-3 del italiano Carlo Ancelotti, que le consideraba indiscutible en la posición de 9. 

Benzema se ha dado cuenta de que su vida será muy diferente con Benítez. El francés no es santo de su devoción y de momento no entra en sus planes. No figura en el once titular que tiene en mente. El técnico madridista contempla un escenario en el que Gareth Bale, Cristiano Ronaldo y Benzema competirán por dos puestos, y sus preferidos son el galés y el portugués. El francés lo tiene muy difícil.

Con el 4-2-3-1 Benzema se queda muy aislado en ataque. En estos primeros partidos de pretemporada se le ha visto incómodo y perdido sobre el césped en muchos momentos. Sin chispa, apenas ha entrado en juego y no ha conectado con Bale ni Cristiano, con el que mejor se entiende siempre.

La soledad del francés contrasta con el cariño con el que el técnico está tratando al galés y al portugués. De momento Benítez está colocando a Bale en la posición de media punta y a Cristiano en la izquierda, pero su idea es situar al galés en la banda izquierda y al portugués como falso delantero centro, lo que deja a Benzema sin sitio en el once inicial. El problema es que el técnico aún no ha podido poner en práctica sus planes porque no cuenta con la complicidad de los protagonistas, especialmente de Cristiano. Le falta acabar de convencer al luso, que siempre ha dejado claro que prefiere jugar por la izquierda, aunque con plena libertad para moverse por todo el frente del ataque.

La prioridad de Benítez es que su equipo apenas conceda ocasiones de gol. El blindaje pasa por un 4-2-3-1 en el que todos los jugadores se sacrifiquen en defensa. Cristiano y en menor medida Bale son los únicos que quedan liberados en este apartado, lo que coloca a Benzema en inferioridad de condiciones para competir con ambos por un puesto en el once titular.

En el once ideal del técnico madridista figura también el colombiano James Rodríguez ocupando la banda derecha, por lo que sólo queda libre una posición. A ese puesto aspiran –en función de dónde acabe jugando Cristiano– jugadores como Isco, Jesé o Benzema, que por tanto ha perdido su condición de indiscutible.

Benítez entiende que Isco, James, Jesé o Lucas Vázquez le ofrecen más garantías, ya que todos ellos saben que si no se sacrifican en defensa no tendrán opciones de jugar.

De momento, la apuesta de colocar a Bale por detrás del 9 tampoco está funcionando demasiado bien. El galés se emplea a fondo con entusiasmo, pero apenas está aportando cosas, porque sus condiciones no parecen las más adecuadas precisamente. No se puede descartar que Jesé acabe quitando el puesto al propio Benzema y que Cristiano acabe aceptando jugar en el centro, por detrás del 9. Benítez solo dispone de tres amistosos más para seguir probando soluciones antes de que dé comienzo la competición oficial, el próximo 23 de agosto frente al Sporting.