REAL MADRID

Bale, suspenso en integración y en castellano

El jugador del Real Madrid Gareth Bale no tiene ningún interés por aprender castellano y no se relaciona con sus compañeros, salvo Modric. Su proceso de adaptación ha fracasado.

Bale jugó por última vez ante el Sporting

Bale jugó por última vez ante el Sporting / sport

Francesc J. Gimeno

El galés Gareth Bale lleva 883 días defendiendo la camiseta del Real Madrid. Durante los 29 meses de estancia en el Santiago Bernabéu, el delantero ha dejado algunos detalles de su calidad, pero no ha acabado de justificar los 101 millones de euros que Florentino Pérez, presidente madridista, pagó al Tottenham para tratar de esconder su fracaso a la hora de fichar a Neymar. El brasileño escogió el FC Barcelona y a Florentino Pérez no le quedó más remedio que apostar por su segunda opción.

El problema es que Bale no ha acabado de adaptarse a su nueva vida en Madrid. No está a gusto en el Bernabéu, no se siente querido por la afición madridista y ni siquiera se esfuerza en aprender castellano. No ha mostrado ningún interés por comunicarse con su entorno en otro idioma que no sea el inglés y por eso en su día dejó de acudir a las clases. Su proceso de adaptación ha fracasado estrepitosamente. El pasado verano el galés intentó sin éxito que Florentino Pérez le dejara regresar a la Premier League. El presidente madridista no dio su brazo a torcer y Bale acabó resignándose a seguir en el Bernabéu después de que el primero le prometiera que habitualmente jugaría de segundo delantero. El problema es que con el cese de Rafa Benítez y la llegada de Zinedine Zidane, el galés ha vuelto a verse jugando en la banda derecha.

Bale apenas se relaciona con sus compañeros de vestuario. Entre el idioma y su peculiar forma de ser, el extremo madridista sólo se comunica con el croata Luka Modric, al que ya conocía de su etapa en el Tottenham. Normalmente va a su bola y se refugia en su familia y en su afición por el golf.

Su balance con la camiseta madridista no es todo lo brillante que Florentino Pérez preveía cuando le fichó. El galés no ha sido capaz de levantar ni una Liga y sólo se ha sacado la espina con la Liga de Campeones que conquistó en Lisboa. Una Copa, una Supercopa de Europa y un Mundial de Clubs completan su palmarés con el Real Madrid hasta el momento.

Otro de sus problemas han sido las lesiones. El galés acumula ya seis lesiones en el sóleo desde que aterrizó en Madrid el 1 de septiembre del 2013. Ahora mismo se está recuperando de la lesión que sufrió ante el Sporting hace dos semanas. El jugador podría reaparecer el próximo fin de semana ante el Granada.