Liga BBVA: Atlético-Real Madrid

Atlético-Real Madrid: El derbi de las grandes dudas

El Real Madrid regresa al escenario donde la temporada pasada inició su debacle, tras perder por un humillante 4-0

Alejandro Alcázar

El derbi entre el Atlético Madrid y el Real Madrid cambia de estilo. El equipo rojiblanco ha dejado de ser impermeable en defensa por una apuesta más creativa. Mientras que el cuadro blanco quiere lo contrario, más garantías defensivas que den equilibrio a su consistencia cuando no tiene el balón. Ambos llegan con grandes dudas, porque los de Simeone encajan más goles que antaño y los madridistas han perdido pólvora en ataque.

La diferencia reside en que los atléticos han fichado jugadores que invitan al cambio, mientras los madridistas mantienen el mismo bloque mejorando a sus hombres de banquillo. En cuanto al estado anímico, los de Benítez llegan con más aplomo al partido ante un rival que suma dos derrotas consecutivas que provocan cierta inseguridad pese a saber a lo que quieren jugar. Además, los futbolistas merengues acuden con la espinita clavada del 4-0 encajado en su última visita, que abrió la caja de las bombas que se llevó por delante a Ancelotti

Partido bravo

Los cambios en uno y otro equipo –en los locales los fichajes y en los visitantes el entrenador–, proponen un nuevo escenario al acostumbrado en los últimos tiempos. Unos derbis en los que los rojiblancos salían airosos menos en el partido más importante que les enfrentó, la final de la Champions de Lisboa. Ahora se intuye el principio de una nueva etapa que nadie sabe como se desarrollará. El Madrid sigue siendo favorito por ese punto más de calidad, pero se equilibra con Simeone en el banquillo y jugándose en el Calderón. Un partido que será bravo, como en los últimos años pese a que ya no está Raúl García, jefe de los alborotadores. En el Madrid no se esperan caras nuevas en el once, incluido Keylor portero del aquel fatídico 4-0; en el Atlético vuelven de sus respectivas expediciones Filipe Luis y Óliver, y debuta Correa.  

Simeone sigue haciendo pruebas en busca de que sus jugadores asimilen el cambio de sistema. Hoy no podrá contar con su jugador más importante, Koke, que no llega a tiempo por culpa de una lesión. La irregularidad de Jackson Martínez, el fichaje llamado a ser el sustituto de los Kun, Falçao, Costa o Mandzukic, sugiere la presencia de Fernando Torres por tradición y raza. Giménez es el relevo natural de Miranda, y Óliver y Correa los llamados a hacer olvidar el arte de Arda Turan. Mientras que Godín, Juanfran, Tiago y Gabi son los que sujetan al equipo, arriba estará el francés Griezmann, que se ha ganado ser el referente y nueva estrella de este nuevo Atlético.

En el Madrid la principal novedad es Rafa Benítez. Un técnico ‘amarrategui’ obsesionado con inculcar responsabilidades defensivas a jugadores que son felices con el balón en los pies y que sufren persiguiéndolo. Sus ideas hacen previsible el fútbol ofensivo que despliegan, que queda en pies de la genialidad individual de sus talentos. Hoy recupera la fiabilidad de Ramos en defensa, y a la BBC en ataque con la velocidad de Bale, pero sigue sin contar con Danilo, James y Pepe, lesionados. El once es el mismo que los madridistas se aprendieron de carrerilla con Ancelotti, aunque tiene más alternativas en el centro del campo. Casemiro Kovacic son fiables, aunque todo indica que repetirán Isco, Modric y Kroos.