A PIE DE CAMPO

La sangre fría de Busquets

Joaquim M. Bertran

UN JUGADOR DE ESCÁNDALO. No es Messi, ni Falcao, ni Iniesta, ni Cristiano Ronaldo, pero lo que hace Sergio Busquets es para sacarse el sombrero. Quienes entienden en esto del fútbol, quienes lo han tenido cerca saben cómo es `Busi¿ y no les ha dolido prendas reconocer públicamente que si pudieran les gustaría asemejarse al centrocampista blaugrana, como es el caso de Vicente del Bosque, o que es un jugador irrepetible, como destacó en más de una ocasión Pep Guardiola, su gran valedor.

Curiosamente, esta semana recibía un curioso reconocimiento a nivel mundial. Abdullah Otaif, un jugador de Arabia Saudí, marcaba un gol y se lo dedicaba a su ídolo, que no era otro que Sergio Busquets. “Es mi jugador favorito a nivel mundial, es un gran futbolista”, reconocía este modesto jugador.

Y es que Busquets tardará en conseguir un `Balón de Oro¿, pero todos los grandes técnicos lo querrían tener en su equipo. Su trabajo es duro y oscuro. Los galones y las felicitaciones se las llevan otros, pero lo que hace en esa zona que controla es imprescindible para que el Barça funcione y rinda.

Ayer, sin ir más lejos y según datos de Catalunya Ràdio, en su primer disparo a puerta en esta Liga consiguió su primer gol. El octavo de los que ha marcado desde que viste la camiseta blaugrana, que no son muchos, pero que contribuyen a hacer aún más grande la figura de este joven futbolista de Badia del Vallès.