El Chelsea quiere limpiar la plantilla en enero

El Chelsea manda en la Premier y, entregado al mando de Antonio Conte, está listo para limpiar una plantilla de la que el entrenador italiano quiere sacar a varios futbolistas.

Si los nombres de Nainggolan, Koulibaly, Lukaku o Muriel han sido colocados en el escenario como objetivos a corto o medio plazo, Abramovich necesita aligerar antes la nómina de futbolistas y ya ha dejado en manos de Conte las decisiones en cuanto a los jugadores que pueden dejar el club.

John Terry es sin duda el nombre más fraternal en Stamford Bridge. En el primer equipo desde 1998, el central cuenta con 710 partidos a sus espaldas pero ha perdido todo el protagonismo con el nuevo entrenador. Suma 367 minutos en la Premier habiendo disputado cinco partidos y acabando contrato en junio su final se adivina próximo.

Terry ha disputado 367 minutos en la Premier y no juega desde el cinco de noviembre

El central, que maneja una oferta millonaria procendente de China, aclaró que no jugaría en otro club de Inglaterra y podría adelantar su marcha a este invierno si encontrase un buen destino en la MLS.

El cambio de sistema impuesto por Conte en la defensa se ha llevado por delante también a Ivanovic, además de mantener invisible a Zouma. El serbio, de 32 años y cuya renovación se afirma día más improbable, ha sido relacionado, entre otros, con el Barcelona y en su agente ha insinuado un acuerdo con el Chelsea para dejarle marchar.

Zouma, lesionado de gravedad en febrero, ha jugado un partido con el equipo reserva pero mantiene, se afirma, una relación distante con el técnico italiano, favorable a negociar una cesión para comprobar si el jugador recupera el tono del pasado. Lo mismo pasaría con el joven Loftus-Cheek, quien apenas ha disfrutado de nueve minutos en un partido de Premier.

Solo el salario frena la salida de Cesc, invisible desde septiembre y desplazado al equipo reserva

También se especula con una cesión para Van Ginkel, fichado en 2013 al Vitesse y que solo ha llegado a jugar tres partidos con el primer equipo blue, que le ha cedido consecutivamente a Milan, Stoke City y PSV. El holandés, ya de 24 años, tampoco ha jugado ni un partido bajo las órdenes de Conte.

Más mediático se contempla el caso de Cesc Fábregas, cuyo alejamiento con el entrenador viene de lejos y su ostracismo ha llegado a provocar que jugase con los reservas. La salida del catalán, bajo contrato hasta 2019, se contempla difícil por su alto salario pero es la que más desearía Conte, quien solo ha contado con él en cuatro partidos de Premier para totalizar 89 minutos.

Obi Mikel ni ha debutado con Conte, que tampoco cuenta con Zouma o Van Ginkel

Quien tiene muchos números para irse es Obi Mikel, quien diez años después de su llegada a Stamford Bridge no ha jugado ni un minuto con el entrenador italiano y de acuerdo a su agente avanzará seis meses su marcha.

Relacionado con el Olympique de Marsella, al mediocampista nigeriano le han puesto en la órbita de Mourinho para llevarlo al United y también ha sido nombrado como seguido por el Valencia.

Ivanovic no tiene claro qué hacer; con Batshuayi se teme repetir el fiasco de Fernando Torres

Michy Batshuayi es un caso más problemático. Fichado por 40 millones de euros en el verano de 2016, su adaptación es tan difícil como la de Alcácer en el Barcelona. El belga aún no ha sido titular en la Premier, ha disputado 84 minutos repartidos en ocho partidos y solo ha marcado un gol, considerando el club la opción de una cesión... Aceptada por el entrenador siempre que le encontrase un sustituto en el mercado.

El último nombre es el de Eduardo dos Reis, portero portugués de 34 años que protagonizó un curioso fichaje por el club en agosto. Firmado por un año su protagonismo ha sido cero y el Chelsea busca rescindirle el contrato de inmediato.