La noche que Schuster y Laudrup eclipsaron a Ronaldinho

El dos de marzo de 2000 el Lleida rindió homenaje a Mario Durán, expresidente del club de la Terra Ferma, con un amistoso que enfrentó a su equipo con el Gremio de Porto Alegre. Allí Europa descubrió a un tal Ronaldinho... Y Lleida disfrutó del reencuentro, en azulgrana, de Schuster, protagonista con la plana mayor del Dream Team.

Ronaldinho jugó en Lleida gracias a Josep Maria Minguella, quien ofreció su fichaje gratis al Barcelona porque al cabo de pocos meses acababa su contrato con el Gremio. Pero el frío de aquella noche provocó que pasara desapercibido y que Núñez y sus consejeros rechazasen su incorporación.

No brilló Ronnie y su figura quedó totalmente ensombrecida por los protagonistas del primer partido de la fiesta, que enfrentó a un combinado del Lleida que había ascendido a Primera División en la temporada 1992-93 con otro de ex futbolistas del Barça. Y ahí el brillo se mantenía a ojos de todo el mundo.

Por encima de todas las figuras sobresalió la de Bernd Schuster, retirado tres años antes en México y que desde su marcha al Real Madrid en el verano de 1988 no había vuelto a enfundarse una camiseta del Barça.

Laudrup, también con pasado madridista, ya se había reconciliado con el barcelonismo militante un año antes, precisamente el uno de marzo de 1999 cuando el Barça rindió homenaje en el Camp Nou a Johan Cruyff en una noche inolvidable.

Lo fue bastante más que la desangelada de Lleida en que Ronaldinho pasó de puntillas y Minguella vio como el Barça rechazaba su oferta.

La noche de Ronaldinho acabó siendo la de Schuster. Y la de Laudrup, Bakero, Stoichkov, Alexanko, Julio Salinas, Tente Sánchez, Goikoetxea, Begiristain, Eusebio o el malogrado y recordado Urruti.