PLANETA BARÇA

La eterna pesadilla de Bojan

Hughes prometió a Bojan un papel principal y, pese a su pretemporada, no está cumpliendo

Bojan Krkic no se rinde y sigue esperando su momento en la Premier

Bojan Krkic no se rinde y sigue esperando su momento en la Premier / sport

Ivan San Antonio

Bojan Krkic, tras cuatro años en el primer equipo del Barça, y tres más en la Roma, el Milan y el Ajax, decidió aceptar un proyecto a priori más humilde en la Premier. Acabó de convencerle la insistencia del técnico del Stoke City, Mark Hughes, que habló con él en varias ocasiones y le prometió un papel protagonista en el equipo.

Así fue durante la pretemporada, en la que el de Linyola fue una de las sensaciones en Inglaterra, no solo por sus tres goles, sino también por su fútbol alegre. Los elogios le llovían y su entrenador hablaba maravillas de él. Bojan volvía a sonreír y parecía haber encontrado la paz. Llegó la competición oficial y jugó tres de las cuatro primeras jornadas de titular. Los resultados no le acompañaron porque el único que se perdió fue el 0-1 ante el City en Manchester. A partir de ahí, se reprodujo una pesadilla conocida para él.

Hughes lo relegó a un segundo plano y empezó a frecuentar el banquillo. Tanto que, en las últimas cinco jornadas solo ha jugado los últimos veinte minutos ante el Sunderland. Bojan no entendía nada, pero tampoco pedía explicaciones. De hecho, era el técnico quien se las daba, públicamente en las ruedas de prensa y, también, en privado, mostrándole su confianza y asegurándole que estaba muy contento por su trabajo durante los entrenamientos. El delantero no entendía nada porque los hechos no refrendaban las palabras del técnico inglés, que apostaba y apuesta por la altura de Crouch, ahora insustituible para Hughes. La transición hacia el fútbol de toque prometida por el entrenador quedó escondida en un cajón y el Stoke City se ha entregado al más puro estilo inglés de colgar balones al área para buscar los centímetros de su delantero centro.

Bojan vivía su ostracismo con incredulidad, aunque no bajaba los brazos. El futbolista, en ese sentido, se vio sorprendido el domingo por una información aparecida en el ‘The Sun’ que aseguraba que el delantero había lanzado sus botas en el vestuario enfadado por sus continuas suplencias. El episodio habría sucedido en el encuentro que el Stoke disputó en el campo del Swansea ocho días. Sin embargo, fuentes del Stoke y el propio jugador desmienten categóricamente que nada de eso sucediera. La única licencia que se permitió fue lanzar una botella de agua molesto, aunque estando aún en el banquillo y viendo que volvía a quedarse sin un solo minuto. La pataleta no ha sido nunca el estilo de Bojan.

Aunque también se ha dicho que el delantero podría plantearse cambiar de aires durante el mercado de invierno, la posibilidad es remota y el exblaugrana espera que su situación cambie. Pese a todo, ya ha mantenido conversaciones con su entrenador para hacerle saber su malestar por el poco protagonismo que tiene y porque considera que no se adecua a su inicio en el equipo y, sobre todo, a lo hablado antes de su llegada. Y es que el Stoke tuvo que hacer una inversión muy fuerte para contar con él.