La pizarra de Pichi

El recambio ideal para Luis Suárez

La guerra civil en el Valencia retrasa el anuncio del fichaje de Alcácer

La guerra civil en el Valencia retrasa el anuncio del fichaje de Alcácer / sport

Pichi Alonso

Un jugador centrado y muy profesional

Un primer dato para acabar con todo tipo de suspicacias. Paco Alcácer está catalogado como un jugador intachable en su día a día. Delantero centrado donde los haya, es uno de esos futbolistas de actitud impecable y que jamás genera un problema de orden disciplinario. Y quiero incidir en este punto para señalar que Alcácer está en el Barcelona por voluntad propia y sabiendo a la perfección su futuro papel en la plantilla azulgrana. Que nadie espere el clásico fichaje con bronca permanente para reivindicar la posible falta de minutos durante la temporada.

Fútbol simple y directo, pero carente de uno contra uno

En estos puntos, hemos desglosado buena parte de las virtudes de un Paco Alcácer que ha crecido en el Valencia, se está consolidando en la selección española y que ahora afronta su mayor reto deportivo: ganarse un hueco en la exigente plantilla del Barça.

Para ello, el delantero tendrá que seguir puliendo detalles en su futbol y ampliando sus registros en el campo. Por ejemplo, es una evidencia que el uno contra uno de Alcácer no es su fuerte y tendrá que mejorarlo.

Luis Enrique deberá encontrar la fórmula para que el juego de ataque azulgrana pueda acomodar a un revulsivo que se siente cómodo “tocando y marchando”. Un fútbol sencillo, sin complicaciones y que puede ser de gran utilidad para un equipo como el Barça, acostumbrado casi a todo lo contrario.  

Llega un Alcácer con vocación de dar salidas a los interiores, pelear con los centrales y encarar sin miedo al portero. Un delantero clásico que llega avalado por algo simple: su facilidad goleadora.

Un '9' para sustituir o acompañar a Luis Suárez

Con la llegada de Alcácer se pone fin a una constante en los últimos tiempos: el delantero valencianista no es uno de esos futbolistas polivalentes, capaces de desenvolverse sin problemas en varias demarcaciones sobre el terreno de juego.

Alcácer es un 9 nato, uno de esos delanteros clásicos que tiene serias dificultades cuando tiene que caer a bandas. Su mayor virtud reside a la hora de buscar la espalda de los centrales rivales. Ahí es un incordio constante.

Su zona de incidencia no va más allá de los 30 metros finales, donde trabaja a destajo con o sin balón. En principio, teniendo en cuenta la configuración de la plantilla, Alcácer está destinado a ser el sustituto de Luis Suárez. Y atención, porque también brilla como segundo punta. 

Un tipo listo y con recursos en el juego aéreo

Ya he comentado con anterioridad que Paco Alcácer tiene la cabeza bien amueblada. Ello también se refleja en el campo, donde se caracteriza por moverse con cierta astucia, intuyendo los desmarques –casi siempre en diagonal buscando la portería sin grandes florituras– y habilitando huecos.

Solo así se entiende que sin tener un físico espectacular, hace gala de un enorme olfato goleador en su definición y también puede presumir de una cierta habilidad en el remate de cabeza. Unos centímetros bien aprovechados. Ni mucho menos tiene el arrastre de Luis Suárez en el cuerpo a cuerpo, pero sí suple esta carencia con una mayor agilidad que el killer uruguayo. En numerosas ocasiones escapa de los forcejeos sacando provecho sin saber muy bien cómo.

En Valencia también destacan una de esas cualidades muy propias del estilo de juego Barça. Sin ser un virtuoso con el balón, Alcácer acostumbra a disfrutar de una importante visión de juego.