MAS MADERA

Villar y Pedrerol, enemigos habituales

Ángel María Villar, en una imagen de archivo

Ángel María Villar, en una imagen de archivo / EFE

Pere Mas

Esto de Tebas y Villar va a acabar como el Rosario de la Aurora y por el camino se va a llevar a medio fútbol español. El último capítulo lo protagonizó Ángel María Villar no presentándose a una reunión con el ministro Wert, Miguel Cardenal (CSD) y Javier Tebas para discutir el decreto del reparto de los derechos televisivos. Apareció Tebas súper-encendido “me pone los pelos de punta esta irresponsabilidad, la RFEF está causando daño al fútbol”. Y a Pedrerol le faltó tiempo para hacer una bonita papilla argumental con su enemigo íntimo habitual: “la selección no interesa, el fracaso del Mundial pasa factura”. Recordaran ustedes hace unos meses la persecución del presidente, a su salida de un almuerzo con Platini, que se tradujo en un “¡Estoy harto de Villar!” por parte del periodista.

Después del partiducho contra Ucrania las cámaras de La Sexta localizaron al presidente. Estaba cómodo, firmando autógrafos, presumiendo “yo he jugado en la selección”, tirando algún tejo “hola chavala, me llamo Ángel” y aconsejando a los más jóvenes “no bebáis más”. A la que apareció el micro verde de La Sexta se le cortó la simpatía en seco, empezó a huir y evitó responder al jaleo con Tebas y valorar el partido de la selección. Otra vez hizo de anguila. ¿De verdad no se dio cuenta antes de que la cámara que le seguía era de La Sexta? Raro.