MÁS MADERA

La incomunicación de Alonso

La rueda de prensa de Fernando Alonso hay que interpretarla como una impugnación de todas las versiones

La rueda de prensa de Fernando Alonso hay que interpretarla como una impugnación de todas las versiones / sport

Pere Mas

PUES YA HA APARECIDO Fernando Alonso para contar en primera persona lo que realmente sucedió (bajo su punto de vista) en el accidente de Montmeló. Digo “bajo su punto de vista” porque su primera comparecencia pública no ha despejado todas las dudas sobre ese misterioso accidente. El piloto asturiano habló desde Sepang, Malasia, justo después de pasar la revisión médica que le permite afrontar esa carrera.

Su rueda de prensa no tuvo desperdicio y hay que interpretarla como una impugnación absoluta de todas las versiones periodísticas que han circulado. Alonso dijo recordar todo el accidente, que la dirección se le bloqueó, que no perdió la memoria y fue tajante al afirmar que no se despertó “en 1995, ni hablando en italiano, ni todo eso que se ha dicho”. El piloto añadió que “sólo perdió la consciencia entre la ambulancia y la clínica” pero que eso fue causado por los medicamentos que le suministraron para transportarlo en helicóptero.

Pues habrá que creer la versión del piloto pero alguna cosa no cuadra cuando ha habido versiones cambiantes del accidente, oscurantismo empresarial propiciado por la gente de McLaren-Honda y un secretismo general desde el minuto uno. Cualquier asesor de comunicación le podría haber indicado la necesidad de construir un relato propio al principio y así se habría ahorrado estos desmentidos imposibles.