Rondo blaugrana

Vale la pena

El seleccionador alemán Low trabaja con el plantel de más valor

El seleccionador alemán Low trabaja con el plantel de más valor / sport

Xavi Torres

A las puertas de las semifinales de la Eurocopa y a la espera de saber quién es el ganador, visto lo visto, podemos confirmar que el fútbol necesita un revolcón. Tres premisas casi evidentes para iniciar el debate: una, en este deporte una cosa son los equipos y otra -muy distinta- las selecciones; dos, el fútbol es de los futbolistas y, casi siempre, el equipo con mejores jugadores suele estar más cerca de la gloria. Por eso los equipos que se comportan como tal y tienen estrellas son los favoritos; y tres, es más fácil defender que atacar.

Futbolísticamente hablando, dos excepciones: la Alemania de Joachim Löw, que propone un fútbol de ataque defendiendo alrededor del balón y en campo contrario, con éxito por cierto (solamente ha encajado un gol, el del penalti de Boateng ante Italia -¿en qué estaría pensando?-) y la Francia de Didier Deschamps, que juega a otra cosa, con mucho músculo, con Pogba y Griezmann, pero interpreta bien el plan. ¿Y el resto? En ataque, Iniesta, un día de Hazard y... ¡ayúdenme! En defensa, cosas interesantes en el Italia-España, bien Conte; en el Alemania-Italia, bien Löw; Pepe con Portugal y, claro, las selecciones pequeñas que hacen lo que pueden a base de cerrarse y correr: Gales, semifinalista, e Islandia, llegando hasta cuartos, han creído en el milagro. Y lo han tocado. Fútbol directo con dosis primitivas, como los saques de banda de Gunnarsson. No se les puede pedir nada más.

Acabará la Eurocopa y volverá el fútbol de clubs. Regresaremos a la realidad de este maravilloso deporte que, o lo protegemos, o nos lo merendamos. Suena a chiste que con lo cargado de la temporada los futbolistas tengan que disputar una Eurocopa de 24 equipos. Y que los seleccionadores lo basen todo -o casi- en lo físico. La supervivencia de los artistas está en serio peligro de extinción.

Así que esperaremos a ver llegar a Messi, Suárez (de la Copa América, ¡Menuda desilusión para ellos!) e Iniesta (de la Eurocopa) esperando que en su hábitat vuelvan a sonreír. Que regresen motivados y dispuestos a disfrutar del balón todo lo que no han podido este verano. A Neymar no, que estará en los JJ.OO. compitiendo contra Sudáfrica, Irak y Dinamarca de entrada. Después, tal vez, contra las Islas Fidji y Honduras (¡no es broma! ¡Empieza la temporada y él estará de ‘pachangas’!). Increíble.

Por eso, señores del FC Barcelona, un consejo, solo uno -con perdón-, y no por repetido menos importante: el modelo. Protejan el método. Pero de verdad. Arriba y abajo. Vale la pena.