OPINIÓN EXPRÉS

Una Copa que no salva la temporada

Messi volvió a ser el futbolista más decisivo del Barça y sentenció la final en la primera parte

Messi volvió a ser el futbolista más decisivo del Barça y sentenció la final en la primera parte / EFE

Lluís Mascaró

No hubo sorpresa. Y el FC Barcelona ganó la Copa. El noveno (y último) título de la ‘era Luis Enrique’. Un título que el equipo blaugrana estaba obligado a ganar para no terminar la temporada en blanco y que, por supuesto, no sirve para hacer olvidar las decepciones de la Liga y la Champions.

El Barça no tuvo problemas para imponerse a un Alavés que utilizó la violencia para intentar frenar, sin conseguirlo, a los blaugranas. Cuando Messi se activó, la resistencia de los vascos, encerrados en su área, se terminó. El crack argentino decidió la final en la primera parte y los segundos 45 minutos se convirtieron en una anécdota.

Con esta Copa (un título menor, insisto), el Barça cierra la etapa de Luis Enrique en el banquillo del Camp Nou. Un ciclo en el que el equipo ha ido de más a menos (se empezó con un histórico triplete y se ha acabado salvando la temporada por los pelos) y que genera muchas dudas sobre el futuro del proyecto. ¿Será capaz Valverde de revertir la dinámica de este Barça?

CONFORMISMO NO, GRACIAS

Pensar que ganar la Copa resuelve todos los problemas sería un tremendo error. Sería caer en ese sorprendente conformismo en el que se ha instalado el presidente Bartomeu. Al Barça hay que exigirle mucho más. Con la mejor delantera del mundo, con el mejor jugador del mundo, este Barça tiene una doble obligación: jugar mucho mejor a fútbol y ganar títulos importantes.

La Liga se perdió matemáticamente en la última jornada. Pero todos sabemos que el campeonato se escapó mucho antes. Por culpa de la irregularidad de un equipo incapaz de ganar en campos como el del Deportivo o el del Málaga. Y la Champions, a pesar del milagro épico ante el PSG, fue decepcionante. Sobre todo porque el Madrid jugará el próximo sábado la final ante la Juventus.

Hay mucho trabajo por hacer este verano. Muchísimo. Robert Fernández y Albert Soler tienen la palabra. Y se han quedado sin excusas.