Y al quinto día Bartomeu resucitó

Josep Maria Bartomeu, presidente del Barcelona

Josep Maria Bartomeu, presidente del Barcelona / sport

Pere Mas

Pere Mas

Cinco días, cinco, tardó el presidente en aparecer y poner un cataplasma sobre el desastre de París. Lo hizo con tres entrevistas en la previa del Barça-Leganés pero las tres comparecencias (Esport3, Movistar Partidazo y Barça TV) no pasaron de un acto de propaganda fallido. Bartomeu tenía su relato a punto con unas ideas fuerza que colocó por triplicado. Sobre el 4-0 trató de aislarlo “tenemos un muy buen equipo con un mal partido, no salieron bien las cosas” pero el churro-encuentro contra el Leganés desmintió su tesis. Sobre el partido de vuelta trató de alejarlo recordando que “estamos en la final de la Copa del Rey” y poniendo el acento en la liga “ahora vienen 4 partidos importantes, 3 de ellos en casa”. También repitió la misma consigna sobre la renovación de Luis Enrique “hablaremos de su futuro en abril, nuestra prioridad es que se quede” y sobre el contrato de Messi “las cosas van bien, pero ya dije que no comentaría nada”. Por lo demás, fue Mónica Marchante en Movistar quien estuvo más incisiva al recordar que “Iniesta dijo que hay un problema de fútbol” o recordando que “algunos jugadores se sorprendieron por el planteamiento... ¿Usted también?” pero Bartomeu se escapó por la tangente. Por suerte para el presidente salió a dar el “mensaje de tranquilidad” en la previa. En el post-partido se lo habrían comido con patatas.