Primero el Málaga... y luego la Juventus

PARTIDO COMPLICADO. En primer lugar el Málaga no se le da bien al Barça en los últimos tiempos. De los cinco partidos disputados con Luis Enrique en el banquillo, dos victorias, dos empates y una derrota. En segundo lugar, es inevitable no mirar de reojo al partido del martes ante la Juve. Finalmente, al haber ganado en Gijón, los de Míchel no estarán presionados y obligados a vencer como hubiesen estado si pierden y caen al descenso. En su corta estancia en Málaga, Míchel ha utilizado mayoritariamente la defensa de 4 pero, extrañamente, ante el Atlético Madrid cambió a defensa de 5. Otra novedad ha sido jugar con uno o dos puntas, e incluso con Keko como segundo delantero y lejos de la banda, donde se desempeña habitualmente. 

SISTEMA MÁS DEFENSIVO. Kameni será su último hombre defendiendo –estuvo fenomenal frente al Sporting–, con línea de cuatro por delante, dos centrales que se complementan bien, Luis Hernández y Llorente –el primero más marcador y el segundo con perfil de hombre libre–. Ambos van bien en el juego aéreo, y atención a la estrategia en saques de banda, ya que Luis Hernández coloca el balón en el punto de penalti buscando la prolongación o remate directo. Los laterales tienen vocación ofensiva y llegan a zona de centro, aunque si actúa Juan Carlos por izquierda puede sufrir en defensa. Camacho es probablemente su mejor jugador y hombre clave –cuidado con su remate de cabeza en faltas y córners–. Podría estar acompañado de nuevo por José Rodríguez, avanzando la posición Pablo Fornals en la media punta, con Keko por derecha, muy incisivo y constante, y la calidad del Chory Castro o Jony por la izquierda. Juanpi pierde enteros ya que no está en su mejor momento. Arriba como referencia Sandro, para quien será un partido especial. Es su máximo goleador y su mejor rematador.