La noche que Piqué perjudicó a Deulofeu

Fue un acto reflejo. Instintivo. Empujó el balón con el brazo. Y marcó un gol que no subió al marcador. Como ya tenía una tarjeta amarilla, fue expulsado. Piqué fue el protagonista de la jugada polémica del Barça-Olympiakos. Una acción que no solo acabó con el central en la ducha antes de la media parte, sino que perjudicó gravemente a Deulofeu, que fue cambiado tras el descanso para dar entrada a un nuevo central, Mascherano.

Deulofeu, que fue titular después de muchos partidos tras su gran actuación en la segunda parte ante el Atlético, estaba ofreciendo su mejor versión futbolística. Deulofeu estaba siendo el Deulofeu que todos queremos ver. El Deulofeu que de verdad existe pero que cuesta tanto de que aparezca. El Deulofeu brillante, que desborda, que crea peligro... Pero su espectáculo solo pudo durar 45 minutos. 

Valverde decidió sacrificarlo para apostar por un cuarto defensa que cubriera la expulsión de Piqué. Y el recital de Deulofeu se acabó. Una pena, porque tenía pinta de que el canterano, por fin, podía ofrecernos un partido entero de alto nivel. Desmintiendo así la teoría de que solo es un jugador de 30 minutos. A pesar de que tuvo que ver la segunda parte desde el banquillo, su actuación nos ilusiona. Mucho.

Porque lo que necesita el Barça son futbolistas como este Deulofeu. Valientes. Descarados. Que se atrevan a buscar la jugada imposible que crea superioridad. El canterano lo hizo muy bien durante medio partido ante el Olympiakos. Ahora solo falta ver si Valverde le va a dar continuidad en los próximos encuentros. Visto lo visto este miércoles en el Camp Nou, se la merece.