El misterio de la pitada al himno

Carlos Iturgaiz reaccionó a la pitada al himno

Carlos Iturgaiz reaccionó a la pitada al himno / Valentí Enrich

Pere Mas

Pere Mas

Algo raro ha pasado este 2017 con la final de la Copa del Rey y la tradicional pitada al himno de España. Da la impresión de que alguien pidió aplicar sordina a la polémica mediática durante los días previos sin que, a la vista de los resultados, sirviera de nada. Como mínimo nos hemos ahorrado horas de radio y televisión especulando sobre la intensidad de la protesta. De hecho, ni la Central Lechera abordó el tema ni el gobierno del PP efectuó declaraciones apocalípticas previas. ¿Casualidad? No creo. Sea como sea el abucheo se produjo con similar volumen que en años anteriores pero se contó de modo muy distinto en TV3 y Telecinco, las dos televisiones que disponían de los derechos. En TV3 Bernat Soler fue diplomático “aquí en el estadio hemos oído un griterío muy importante” e irónico “en casa no sé cómo se habrá oído, porqué ya saben que esto pasa por un cúmulo de procesos que lo amplifican o minimizan en función de cómo se toquen los mandos”. Pues en la televisión catalana nadie tocó los mandos y se escuchó con igual intensidad durante toda la ejecución. Muy distinto fue lo sucedido en Telecinco. El volumen de la Marcha Real se incrementó ligeramente en dos ocasiones mientras que Manu Carreño optó por no decir absolutamente nada a parte de “todo a punto para que suene el himno de España” antes y “empieza la final” después. ¿Iniciativa propia o actuación concertada?