Messi es víctima de la desesperación

Argentina no jugó nada bien. Sigo sin comprender cuál es la idea de juego que quiere imponer Edgardo Bauza. El equipo jugó mal. Se vio la ansiedad de la clasificación, y pese a jugar mal contaron con el beneficio y el azar, que juega siempre un papel preponderente en este tipo de partidos. Veo un equipo que se hace fuerte en la experiencia, en el tiempo que llevan estos jugadores jugando juntos. Se muestra voluntarioso y combativo, pero sin luces y sin ideas claras. Y la falta de una idea la sufren todos los jugadores, también un crack como Messi. 

En la confusión que producen la falta de una idea y la urgencia de clasificarse para el Mundial, el equipo pierde sus luces. Más allá de que estos jugadores se conocen mucho, y el equipo parecía que había mostrado una mejora en el partido anterior con Colombia, el entrenador sigue sin poder imponer su idea. El equipo no tiene un rumbo colectivo. Veo  miedo escénico. Veo una presión muy grande y es tarea del entrenador pacificar. Que los jugadores hayan abierto un punto de conflicto con la prensa tampoco suma a la situación. El espectador no está feliz viendo a su selección jugar así, sin una idea, sin ser protagonista. Y la única manera de callar los cuestionamientos es consolidando una idea de juego en la que los jugadores realmente crean y confíen. 

Argentina ganó varios partidos sin jugar bien, porque la magia de Messi disimuló las calencias del equipo. En este partido ni la magia de Messi estuvo presente porque los grandes jugadores necesitan escenarios, necesitan apoyarse también en un funcionamiento colectivo. El crack se pierde en la cancha víctima de la desesperación por encontrar el resultado. Los jugadores también deben empezar a mirarse y a preguntarse por qué no pueden dar cuatro pases seguidos. 

Atlético de Madrid y Barcelona tienen estilos diferentes de juego, pero tienen el convencimiento de una idea para conseguir el resultado. Ese convencimiento lo tiene Chile. La Roja mantiene una conducta de juego que la logró durante ocho años. Los de Juan Antonio Pizzi hicieron un partido distinto en el cual no les pesó ser visitantes. Nos hicieron sufrir. 

Bauza sabe que si para clasificarse apuesta por el grupo de jugadores del exterior no tiene suficiente tiempo de trabajo, con lo cual es una decisión suya. Y no hay justificaciones. Si quiere tiempo de trabajo tiene que modificar su idea y trabajar con una base de jugadores del fútbol local. Tiene que saber que tendrá con los jugadores que juegan en el exterior solo un mes antes del Mundial. Y creo que Bauza se equivoca en sus declaraciones. Aunque diga que el equipo jugó bien, los futbolistas saben que no fue así. Y él debe saberlo también. 

La responsabilidad del entrenador es poner en práctica su idea. Que su equipo juegue a lo que pretende. Él no puede decir que la aspiración de Argentina es clasificarse para el Mundial. Por historia Argentina ya tiene que estar trabajando para ganar el Mundial, como le sucede a Alemania, a Brasil, Uruguay y hasta México. Y la eliminatoria sudamericana siempre fue dificil. Cuando escucho que la idea de juego del entrenador es ganar, me parece una obviedad, no creo que ningun equipo haya jugado para perder ni el Brasil de Pelé, ni la Holanda del 74, ni Alemania. Cada selección se impuso en su tiempo por su estilo. Que comunique su idea, que trabaje para que la incorporen sus jugadores y se acaban las discusiones. 

No me gustó como jugó Argentina. Si me gustó el resultado, siempre es mejor ganar que perder. 

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