Luces de alarma en el Barça Femenino

El Barça cayó sin discusión en el Calderón

El Barça cayó sin discusión en el Calderón / EFE

Miki Soria

Miki Soria

Cualquiera que siga mínimamente el fútbol femenino se alegrará de lo que pasó en el Vicente Calderón más allá de los colores de cada uno y de lo que sucedió sobre el césped. El fútbol femenino cada vez va a más y también interesa a más gente en España. El fenómeno es imparable y el último ejemplo se vivió este domingo en el Vicente Calderón, donde 13.935 personas se congregaron para ver el duelo entre los dos grandes favoritos al título de liga: Atlético de Madrid y Barça. 

A partir de ahí, y bajo el prisma del Barça, la realidad es preocupante porque, después de un año en el que no se ganó ni la liga ni la Copa de la Reina, esta temporada el panorama no pinta mejor por mucho que la plantilla azulgrana sea la mejor del campeonato. El equipo arrancó muy bien la temporada tanto en liga como en Champions, pero en el fútbol hay una máxima que pocas veces falla: las individualidades pueden ganar partidos, pero son los equipos los que ganan títulos.

El Barça fue el 'pequeño' en el Calderón

¿Por qué en todos los partidos importantes el planteamiento del Barça pasa por jugar con seis jugadoras de corte defensivo? ¿Por qué el Atlético le ha ganado la partida al Barça en los tres últimos duelos entre ambos de manera tan clara? ¿Por qué se hacen cambios por defecto en el minuto 60 de todos los partidos independientemente de cómo vaya el partido y del rival? ¿Por qué da la sensación de que todos los equipos están más trabajados tácticamente que el Barça?

Demasiadas preguntas cuya respuesta no es la que dio el responsable de la sección, el vicepresidente azulgrana Jordi Mestre, cuando acusó a las futbolistas de falta de ambición y humildad tras perder la última final de la Copa de la Reina. Apoyar al fútbol femenino no es solo salir en la foto cuando las cosas van bien, sino darse cuenta de la realidad del día a día. Y es en el día a día donde ha de haber una reacción para que no suceda lo mismo que la temporada anterior. Lo mejor es que todavía queda muchísima temporada por delante para evitar que esta luz de alarma se convierta en algo más grave.