Los americanos inventan la Superbowl del fútbol

Tom Brady atiende a la prensa durante los dias previos al SuperBowl

Tom Brady atiende a la prensa durante los dias previos al SuperBowl / EFE

J.Mª Casanovas

J.Mª Casanovas

Atención, mucha atención, porque los americanos acaban de descubrir el negocio del fútbol. Son auténticos especialistas en convertir el deporte en espectáculo, el espectáculo en entretenimiento y el entretenimiento en business, en dinero. Un círculo mágico que en Europa no se sabe explotar como hacen allí porque falta la visión comercial de convertir los eventos deportivos en un espectáculo familiar durante todo el día. Los americanos nos están enseñando con la organización de un clásico en Miami, un Barça-Madrid de pretemporada, el enorme potencial que tiene el fútbol si se sabe convertir en un espectáculo parecido a la Superbowl.

La historia merece contarse porque hay que descubrirse ante los organizadores que tienen visión de futuro y talento. Hasta el 2011 los clubs punteros europeos planificaban la pretemporada con un stage de entrenamiento y una serie de partidos amistosos intrascendentes. Aquel año, un americano descubrió que se podía organizar una competición aprovechando el mes previo al inicio de las competiciones en Europa reuniendo a los clubs mas importantes del mundo. Así nació la International Champions Cup, el torneo internacional amistoso más importante del calendario en el que Barça y Madrid llevan varios años participando.

Detrás de esta Champions de verano que ya es un gran negocio, está Stephen Ross, uno de los diez hombres más ricos del mundo según la revista ‘Forbes’, propietario del Miami Dolphins, empresario inmobiliario y dueño de Relevant Sports, la empresa que organiza la competición. El año pasado tuvo el interés de acudir a Madrid a ver el clásico y quedó impresionado de la pasión y fuerza que tenía el partido de la máxima rivalidad. Habló con Bartomeu y Florentino Perez, les ofreció 6 millones por jugar y les convenció rápido para hacer un clásico en verano en el mes de julio. Aquella idea que inicialmente podía parecer arriesgada, se ha convertido en un gran éxito. 65.OOO espectadores han llenado esta madrugada el Hard Rock Stadium de Miami en un partido que tenía toda la parafernalia de los grandes montajes americanos, deporte, show y negocio. No le ha faltado de nada, dos rivales que se han enfrentado con la misma intensidad que si fuera un match de Liga conscientes de la trascendencia del mismo, un show musical en el descanso, retransmisión de ESPN a 175 países y ambiente de fiesta en las gradas con los 

aficionados latinos.

La UEFA tiene motivos para comenzar a preocuparse. Stephen Ross se está enamorando del fútbol y piensa que su International Champions Cup puede ser el punto de partida para crear en el futuro junto a los clubs más importantes del mundo, una SuperLiga Mundial que podría desbancar a la Champions si la UEFA se duerme.