La cara buena funciona, la cara mala no da la talla

Iniesta dice que hay que cambiar el chip rápidamente

Iniesta dice que hay que cambiar el chip rápidamente / EFE

J.Mª Casanovas

J.Mª Casanovas

El Barça pudo ganar ayer en Málaga media Liga y acabó regalando tres puntos al Madrid ya que encajó una penosa derrota. Lo tenía todo a favor para dar el golpe de gracia al líder, para depender de sí mismo hasta el final del campeonato, pero fracasó de forma estrepitosa en su intento. El equipo de Luis Enrique tiene dos caras en función de la alineación. Cuando juegan los indiscutibles, los mejores, es capaz de todo. Cuando alinea un once de circunstancias nunca da la talla lo que es prueba evidente de que el banquillo de reservas deja mucho que desear. En La Rosaleda hubo dos ausencias obligadas, Piqué y Rakitic, lo que ya es un hándicap. Pero encima el técnico asturiano hizo más cambios de los aconsejables al dejar fuera de inicio a Iniesta y Sergi Roberto víctimas de unas rotaciones incomprensibles.

A la hora de la verdad, el problema más que las ausencia fue los que jugaron. Un centro del campo con André Gomes y Denis Suárez es un invento que ya ha fracasado varias veces esta temporada. No dan consistencia al centro del campo y encima repercuten negativamente en el rendimiento de Busquets que tiene que cubrir más terreno y pierde la posición. Por ahí se rompió el equipo y fue tan evidente que en el descanso Luis Enrique corrigió su error dando entrada a Iniesta y Sergi Roberto. Pero los desajustes no acabaron aquí. Poner a Mascherano de lateral es renunciar al juego ofensivo por la banda, confiar en Mathieu es jugar con un riesgo innecesario. El francés hace tiempo que no tiene sitio en este equipo, fue responsable del gol de Sandro y se ha ganado la baja a final de temporada.

La derrota duele sobre todo por la forma como se produjo. El Atlético había echado una mano sacando un meritorio empate del Bernabéu, Messi y compañía no supieron aprovechar la oportunidad de oro. Es un tropiezo grave pero nada más. La Liga sigue viva si son capaces de ganar en el Bernabéu. La lectura positiva es que anoche solo perdieron un punto respecto al líder. La lectura negativa es que dejaron pasar una gran ocasión para ponerse líderes. Además, perdieron a Neymar que fue expulsado y le puede caer una sanción comprometida ya que camino de los vestuarios insultó al árbitro. El brasileño, que fue el mejor por su movilidad, desmarque y velocidad, hizo un flaco favor al equipo cuando perdió los nervios a 25 minutos del final y dejó a su equipo en inferioridad. Derrota dura y cruda que dejó al equipo fundido tras el gran esfuerzo de la segunda parte por remontar. Hay que pasar página rápido para que este golpe moral no repercuta contra la Juventus.