Barça, la encuesta de la discordia

Es una máxima universal que quien ostenta el poder suele hacer un uso abusivo de él, a su conveniencia, actuando de una forma cuando el viento sopla a favor y de otrwwa muy distinta cuando sopla en contra. Los presidentes de Gobierno, incluso los de fútbol, saben mucho de eso. Theresa May adelantó las elecciones en Gran Bretaña pensando que ampliaría su mayoría absoluta y Florentino Pérez las convocó en el Real Madrid sabiendo que no tendría rival en las urnas.

El famoso ‘Observatori Blaugrana’. En el FC Barcelona también saben manejar los recursos y resortes de la entidad a su antojo, en tiempo y forma del interés de sus responsables, ya sean directivos, ejecutivos o asesores. Un claro ejemplo de todo ello lo tenemos con el famoso ‘Observari Blaugrana’, la macroencuesta que cada año encarga el FC Barcelona para conocer el estado de opinión de la masa social del club sobre todo lo que tiene que ver con la institución. 

El núcleo embrionario de este ‘Observatori’ fue la obsesión que tenía Sandro Rosell, como presidente del FC Barcelona, por conocer lo que pensaba el socio de él, de la gestión del club, hasta el punto que llegaron a realizarse encuestas claramente ilegales porque se hacían preguntas en clave electoral y sobre personas que no estaban en el club. De aquellas irregularidades no se enteraron la mayoría de vicepresidentes ni ejecutivos del club, solo el nucleo duro de Rosell. El dossier estaba en la mesa del presidente del FC Barcelona y eso le bastaba al ejecutor de la obra.

Ya sin Sandro en la poltrona, Josep Maria Bartomeu continuó encargando esas encuestas, pero le lavó la cara llamándolas ‘Observatori Blaugrana’. En junio de 2015, con el triplete bajo el bolsillo y las elecciones a la presidencia a la vuelta de la esquina, Bartomeu puso esa encuesta a disposición de sus rivales electorales. Un gran detalle. Y el año pasado, con la Liga y la Copa del Rey en el zurrón, los resultados del ‘Observatori’, que arrojaron una altísima satisfacción del socio por la gestión del club, se conocieron a finales de junio, lo que dio pie a una extensa rueda de prensa de Josep Maria Bartomeu sin límite de tiempo.

La temporada 2016-17 acabó como ustedes ya conocen, con la Copa del Rey ganada y una sensación de insatisfacción generalizada instalada en la masa social del FC Barcelona, preocupada por el discreto rendimiento del equipo y los pleitos judiciales aún abiertos y otros ya cerrados. Total, que estamos a mediados de julio y el famoso ‘Observatori Blaugrana’, ¡oh, casualidad!, todavía no se ha presentado. Y Bartomeu tampoco hará la tradicional rueda de prensa porque ya se ha manifestado en diferentes medios de comunicación, SPORT entre otros.

Hubiera sido más ejemplar, más transparente y más sano para todos los culés, que la presentación del ‘Observatori Blaugrana’ se hubieran llevado a cabo como en años anteriores, al final de la temporada. Ahora, con la 2017-2018 ya en marcha, todo lo que se haga suena a componendas, requiebros... y un claro abuso de poder. Es decir, aquello de “lo hago cuando a mí me da la gana y me conviene y no cuando realmente toca”.