El árbol y el bosque

Mboula se le escapa al Barcelona

Mboula se le escapa al Barcelona / Joan Monfort

Xavi Torres

Xavi Torres

No se entiende el futuro del Barcelona sin los jugadores de la casa y bla, bla, bla”. “La Masia es el orgullo y bla, bla, bla”. “La FIFA y la Mano Negra han hecho daño pero ya estamos otra vez al nivel y bla, bla, bla”... ¿Les suena? ¿Cuántas veces han escuchado esta canción? Josep Maria Bartomeu y Jordi Mestre, el vice deportivo, la cantan desde siempre. ¿Se la creen ellos? Hay que entender que sí, a pesar de haber sido alertados. Llegados a este punto, pues, hay que considerar que el problema es más grave de lo que pudiera parecer.

¿Por qué? Porque siendo conscientes de la situación toman partido por el sector que lidera Albert Soler (el más alto ejecutivo deportivo) y que tiene a Pep Segura (secretario técnico del fútbol formativo profesional) como hombre fuerte, un gran técnico pero con una mirada diferente a la del método que convirtió al Barça en la referencia mundial. “Hay que evolucionar porque hay generaciones y generaciones”, explica Soler, “y ahora estamos ante algunas que no dan frutos”. ¿Son correctas estas afirmaciones? ¿Coinciden en todas las áreas del fútbol base? ¿Es cierto que no suben futbolistas de nivel? ¡No! ¡Si hay 17 internacionales entre los sub-16 y los sub-19! ¡Solo hay que confiar en ellos! El más que presumible ascenso del Barça B (tras el 1-4 en Santander) lo va a tapar todo. Al tiempo.

Siempre ha habido jugadores que se han ido. Nada que objetar. Pasó con Piqué, con Cesc, con Bellerín (la lista es larga...) y ahora, com Mboula y Éric. Y habrá más. Ahí no está el problema. Donde es importante atender es a la complicada estructura de Bartomeu que (entre múltiples cosas más, que hoy no tocan) provoca un cortocircuito en el trayecto hacia el Camp Nou en la última etapa de formación. El problema es que el futbolista de la cantera hoy, en el club azulgrana, no ve viable llegar al ¡Barcelona B! Jordi Mboula sabe mucho del tema… Caso filial. Como para subir vale todo (pero todo, ¿eh?) ficharon a 15 jugadores. El fracaso del fútbol base más brutal que se recuerda: 15 futbolistas en el B que no han pasado por el equipo juvenil. Y ninguno le ha servido a Luis Enrique para las múltiples situaciones de emergencia que ha tenido durante el año. Ninguno. El objetivo era subir. ¡Y ojo, que los futbolistas y Gerard, de esto, culpa cero! Y una vez logrado el ascenso, ¿qué pasará la próxima temporada? ¿Cuántos jugadores del Juvenil van a subir al filial? Además de los que ya han acabado ahí, Cucu y Aleñá (¡cuidado!), ¿uno o ninguno? ¡Ah! ¡Que como es 2a A hay que dar tiempo a los jóvenes! Entendido.

A Éric García, el crack del Cadete, tampoco le seduce lo que ve. Además de Martínez, Marlon y Borja López, el filial ha contratado para la temporada que viene al central uruguayo Santiago Bueno. ¿Confianza en sus posibilidades? ¡Todas! ¿Perspectivas ante la política del club? Respondan ustedes. Ha sido campeón de Europa sub-17 pero en el Barça ni siquiera ha jugado en el Juvenil B. No ve salida.

En la Ciudad Deportiva hay quejas de padres –normal–, jugadores –comprensible–, agentes, algunos más barcelonistas que la bandera –insólito–, entrenadores –sorprendente–, hombres de club –incomprensible– y exilustres –alucinados–. Cuesta identificarse con lo que viven y lo que ven. Pero como el Barça B va a subir, nada, todo arreglado. Adelante.