'Ahora dale,volvé a casa'

Messi envió un mensaje a sus seguidores

Messi envió un mensaje a sus seguidores / AFP

Carme Barceló

Carme Barceló

“¡Suerte que me quedé despierto!”. Y eso que él ha tenido la fortuna de crecer y jugar a su lado, ser su amigo y compartir muchos momentos personales y profesionales. Cesc compartió en sus redes sociales esa frase y la imagen de un Messi imperial marcando uno de los tres goles con los que clasificó a su país para el Mundial. No hubo lugar para el bostezo con el más grande. Estuvo a la altura de ese día D para alegría de los suyos, los de aquí y los de allí. Y para rabia de los enemigos, en Argentina y en estos lares. No aplaudiré los insultos en la celebración post-partido que tuvo lugar en el vestuario albiceleste. Nunca. Pero tampoco los que le dedicaron a Messi y a sus compañeros desde distintos foros. La presión a la que han sometido al ‘10’ multiplicaba por mil su número. Encontró eco en Madrid, donde muchos hicieron acopio de café para ver el partido esperando el desastre. ¿Objetivo? Arremeter contra Leo y expandir el temor que una depresión mayúscula perjudicara su rendimiento en el Barça. Ahí estaban, limándose las uñas y rezando para que la altura de Quito rebajara la del mejor jugador del mundo. La posibilidad de que Argentina quedara descabalgada del Mundial era una arma de destrucción masiva en manos de la caverna. Y se fueron a dormir con una nueva lección de fútbol, con hat trick incorporado, y un país que merecía llegar a Rusia. Más empequeñecido quedó Cristiano Ronaldo en ese sueño. Ante Suiza, el portugués jugó un partido de pesadilla en el que estuvo, desaparecido y fallón. Imagino que se reservaría para las necesidades del equipo que le paga cada mes, que sigue esperando su máximo rendimineto para poder acortar distancias con el líder de la Liga.

“Orgullo. Como siempre, no había dudas. ¡Te lo mereces más que nadie, amor! Ahora dale, volvé a casa que le extrañamos mucho!”. Antonella Roccuzzo felicitó así a su marido y le pidió lo que el barcelonismo, con Valverde al frente, pensó en cuanto terminó el partido. Respiro de alivio. Que Messi vuelva feliz es casi como sumar siete puntos más.