Dan Evans: ser 'chico' malo es cosa del pasado

Dan Evans celebra la victoria más importante de su carrera

Dan Evans celebra la victoria más importante de su carrera / AFP

Neus Yerro

El británico Dan Evans fue el autor de la eliminación del primer 'top ten' en este Open de Australia. 'Evo', de 26 años, lograba el mayor triunfo de su carrera al superar al croata Marin Cilic, número siete del mundo y campeón del US Open 2014, por 3-6, 7-5, 6-3 y 6-3.

Finalista en Sydney la semana pasada, Evans está en el mejor momento de su carrera. Pero no fue tan idílico en sus comienzos. Dan fue uno de esos tenistas rebeldes que tuvieron no pocos problemas que pudieron haber impedido vivir un día como el que vivió en la tercera jornada del Open de Australia.

A las lesiones se sumó su naturaleza rebelde y una falta de compromiso y aplicación. La Federación Británica (LTA) tuvo que llamarle al orden en más de una ocasión

Así le impidieron disputar el torneo júnior de Wimbledon 2006 por ser "un estúpido en pista", en palabras de la propia LTA. Dos años más tarde era suspendido seis meses por la LTA tras ser fotografiado en una discoteca a primera hora de la mañana. 

Una sanción que implicó, además, que se le cerraran las puertas a conseguir invitaciones para los torneos y se le impidiera acceder a los centros de entrenamiento de la Federación Británica y a sus entrenadores. Ni siquiera eso impidió que, a final de año, se hiciera acreedor del premio al mejor tenista júnior británico.

Empezó en el circuito y fue tirando. Nada espectacular pero sí lo suficiente para ser convocado para el equipo británico de Copa Davis. En diciembre de 2010, sin embargo, Evans formaba parte de un grupo de tenistas que iban a dejar de recibir las ayudas económicas de la LTA. ¿La razón? No cumplían con los niveles que se les exigían.

La Federación Británica, viendo su potencial, se resistía a dejarle ir. Volvieron a ayudarle, de nuevo dejaron de hacerlo... "A nadie le gusta tener reproches. Y yo los tengo desde los 18 años. Pero ahora es distinto. Tengo suerte de tener otra oportunidad. Durante un tiempo era divertido salir con los amigos pero ver que otros con menos talento que tú lo están haciendo bien no lo es tanto", admitía en abril de 2013.

Poco a poco, Dan ha ido madurando. Le ha costado, sí, pero lo ha logrado. Quizá alguien debería hablarle de él a Nick Kyrgios.