BALONCESTO - NBA

¿Qué les pasa a los Warriors?

El campeón de la NBA está al borde del precipicio y aquí analizamos las razones de su derrumbe en una serie ante los Thunder que tan solo están a una victoria del título en el Oeste

Stephen Curry necesita recuperar su mejor versión

Stephen Curry necesita recuperar su mejor versión / sport

Sergio Vera

Avisaban los Golden State Warriors al batir el récord histórico de victorias y derrotas en una fase regular (73-9) que de poco serviría tal brutal registro si no acababan con el anillo de nuevo en su poder. ¿Profecía? Quizás. Lo cierto es que con la<strong> final del Oeste con 3-1 para los Thunder</strong>, los Warriors están al borde del abismo.

De despedirse de una temporada para la historia muy lejos de la versión despiadada de un equipo que ha dominado la competición con mano de hierro... hasta ahora.

El reto que tienen por delante ante los Thunder es de una magnitud enorme. Para empezar, levantar un 3-1 es una misión casi imposible y la historia así lo atestigua: solo 9 de los 232 equipos que se han visto en esta tesitura han sido capaces de darle la vuelta a la eliminatoria. ¿A su favor?  Golden State no ha perdido tres partidos seguidos desde noviembre de 2013.

"Somos un equipo especial", dijo Curry tras el encuentro. "Esta no es la forma en que vamos a salir", avisó. La gran estrella de los Warriors se resite a entregarse a un rival que simplemente les está atropellando en la versión más sanguinaria que se recuerda.

LA FÓRMULA DONOVAN

LA FÓRMULA DONOVAN

Ritmo alto, vertiginoso, anotación inalcanzable... Los Warriors luchan precisamente frente aquello que les ha permitido golpear a todos y cada uno de sus rivales. Bill Donovan ha encontrado la solución apostando por un quinteto formado por Westbrook, Waiters, Roberson, Durant e Ibaka que hasta esta eliminatoria tan solo había coincidido en pista 46 minutos en todo el curso. 

Si ante los Spurs, Donovan acertó con la pareja Adams-Kanter, en esta ocasión la versatilidad de su nueva apuesta ha asfixiado por completo a su rival. "Uno tiene que estar dispuesto para tomar algunos riesgos", señaló el técnico. Westbrook y Durant producen al mismo ritmo de siempre y mientras los Warriors se empeñan en tratar de neutralizarles, Roberson, Waiters e Ibaka ejecutan en silencio. Una fórmula para la que los Warriors no han encontrado respuesta. 

SÍNTOMAS DE DESGASTE

SÍNTOMAS DE DESGASTE

Visiblemente agotados, desacertados y fundidos, el equipo de Steve Kerr presenta síntomas de alarma. La presión defensiva asfixiante en todas las líneas ha provocado un cortocircuito catastrófico en el juego ofensivo de los Warriors que suman un alto nivel de pérdidas inédito hasta la fecha. Curry, lastrado en este Playoff tras su lesión de rodilla frente a Houston, ha disminuido sus promedios en la serie frente a OKC en todos los frentes estadísticos y un Westbrook demoledor ("Juego cada partido como si fuera el último, con independencia de quién está delante de mí") marca el ritmo en un duelo clave en el destino de la serie. 

  • Curry - Fase regular: 31.7 puntos, 50% de acierto en tiros de campo (45% en triples) y 3.3 perdidas
  • Curry - Serie vs Oklahoma: 24.2 puntos, 41% de acierto en tiros de campo (37% en triples) y 4.25 perdidas.

"Es en gran parte mi responsabilidad. Tengo que jugar mejor. Tengo que controlar la situación. Obviamente quiero anotar más, pero es más importante ser paciente en ataque. Voy a ser mejor”, dijo el base de Akron.

Otro de los termómetros que permite calibrar la salud del juego de los Warriors es Draymond Green<strong>El alapivot se encuentra totalmente perdido </strong>y superado en su emparejamiento con Durant. En los últimos dos partidos ha acreditado un +/- terrorífico que da cuenta del desastre californiano: -43 en el tercer partido y -30 en el cuarto partido con él en pista.

La madrugada del jueves al viernes, al amparo del Oracle Arena y su público, los Warriors tratarán de poner la primera piedra para la gran remontada... ¿Están todavía a tiempo?