BALONCESTO - NBA

Duncan logró lo "imposible", que Popovich se emocionase

El legendario ex ala pívot Tim Duncan, apenas 24 horas después de anunciar la retirada de la competición tras 19 temporadas de jugador con la franquicia de los Spurs de San Antonio, logró otro hito histórico, hacer que el entrenador Gregg Popovich se emocionase en público

Duncan y Popovich, en una imagen de archivo

Duncan y Popovich, en una imagen de archivo

EFE

Gracias a DuncanPopovich al final mostró su lado más emotivo y humano y consiguió emocionarse cuando quiso compartir con los periodistas algunos de sus pensamientos y recuerdos en su relación profesional y humana con Duncan.

"Es la persona más verdadera, sincera y real que he conocido en mi vida", subrayó Popovich, que además adelantó que era un profesional insustituible en su labor dentro del equipo.

Popovich que habló durante 15 minutos, por momentos fue incapaz de ocultar sus emociones y todo mientras vestía una camiseta con el rostro de Duncan impreso.

Cuando respondió la última pregunta, el entrenador de los Spurs se giró, metió las manos en los bolsillos y en silencio emprendió el camino hacia una nueva era para el equipo de San Antonio, en la que no estará ya Duncan.

Pero si el ala pívot español Pau Gasol, al que todos han calificado como el profesional que más se acerca al perfil deportivo y humano de Duncan.

Popovich admitió que era consciente que el día del adiós de Duncan iba a llegar, pero para nada ha hecho más fácil la realidad que ahora le toca vivir sin la estrella que siempre daba confianza, tranquilidad y que se hizo "irremplazable".

Con la voz por momentos entrecortada, y tratando de evitar la solemnidad, Popovich se despidió el martes públicamente de la carrera como jugador de Duncan, ganador de cinco títulos de liga, que el lunes anunció la retirada en un comunicado difundido por el equipo, con lo que puso fin a una carrera de 19 años en San Antonio.

"Pensé que lo mejor era salir a hacer esto y de alguna manera despedirme de él", comentó Popovich. "Algo que es imposible por muchas razones".

Popovich habló en una esquina de las instalaciones de entrenamiento de los Spurs, el lugar en donde habla con la prensa al concluir las sesiones con los jugadores. No hubo conferencia de prensa, no hubo nada organizado, ni siquiera se permitieron coberturas en vivo.

Incluso para un evento que tendrá tanto impacto en el equipo, la liga y el deporte, los Spurs mantuvieron la ocasión lo más simple posible, como lo era dentro y fuera del campo el propio Duncan.

Además, Popovich dio a entender que el verdadero deseo de Duncan es que la filosofía que se ha establecido dentro del equipo permanezca a pesar de su marcha.

Cuando se le preguntó a Popovich que eligiera a cualquier personaje histórico para cenar, el entrenador de los Spurs mencionó a la Madre Teresa, Jesús, el Dalai Lama, William F. Buckley, Gore Vidal y al actor John Cleese.

Pero si tenía que elegir entre esas personas o cualquier otra, Popovich dijo que cenaría con Duncan.

"Sinceramente les puedo decir que mi cena sería con Timmy", declaró Popovich, que nombró a Duncan por el apodo cariñoso que le tiene. "Y sería con él porque es la persona más auténtica, consistente y sincera que he conocido en mi vida".

"Lo puedo reprender en un partido y preguntarle porque no es más agresivo al ir por los rebotes y decirle eso enfrente de todo el mundo", explicó Popovich. "Y de regreso a la cancha actuará con una nobleza única, algo que vieron sus compañeros y por eso lo aman".

Duncan pasará a la historia como uno de los mejores, y Popovich destacó que fue el mejor compañero que cualquier jugador de los Spurs pudo haber tenido.

También hubo momentos de humor, como cuando Popovich contó que Duncan lo obligó a vestir la ropa que le dio --incluyendo la camiseta que traía puesta-- o de lo contrario no jugaría.

Sin embargo, Popovich no pudo ocultar en sus expresiones la mezcla de tristeza y agradecimiento tras hablar especialmente de la humildad de Duncan, y como le fue inculcada hace mucho tiempo.

Popovich contó una historia sobre una ocasión en la que el padre de Duncan, quien murió en 2002, le expresó al entrenador de los Spurs que necesitaba garantías de que su hijo no cambiaría con la fama o la fortuna.

"Aún recuerdo antes de que su padre falleciera, que me miró a los ojos y me dijo: 'lo haré responsable para asegurarme de que cuando acabe de jugar, sea la misma persona que es hoy en día'. Y en ese sentido, lo es", comentó Popovich cargado de emoción.

"Es una persona mayor, todos lo somos a través de las experiencias. Pero su naturaleza, era muy humilde cuando llegó y después de todo lo que ha conseguido, sus logros, sigue siendo el mismo. No ha cambiado nada", subrayó Popovich.

Duncan y Popovich ganaron juntos más partidos que ninguna otra pareja entrenador-jugador en la historia de la NBA (1.001), pero el máximo responsable técnico de los Spurs dijo que su éxito se lo debe al ya exjugador de los Spurs y no al revés, de ahí que su ausencia hará más difícil la labor de cara a la próxima temporada.