Espectacular remontada de Phelps para ganar los 100 metros libres

Las Arena Pro Swims que se han disputado en Mesa (Arizona) como una de las seis sedes de esta competición a lo largo de todo el país han servido para demostrar que Michael Phelps ha vuelto. Después de cumplir seis meses de sanción por ser 'cazado' por segunda vez conduciendo ebrio (le impusieron también un año de prisión suspendida y 18 meses de libertad condicional), muchos pensaron que aquel podría ser el fin del mejor nadador de la historia y del deportista más laureado en los Juegos Olímpicos con 22 medallas, 18 de ellas de oro. De hecho, el propio 'MP' llegó a plantearse esta posibilidad en las primeras semanas. Pero al final decidió regresar con la mente puesta en los Juegos de Río del año que viene.

En la madrugada de este domingo, el de Baltimore participó en las finales de 200 estilos y 100 libres. En su primera prueba tras seis meses de inactividad, Phelps se había impuesto en la final de 100 mariposa (52.38), por delante de su compatriota y gran rival, Ryan Lochte (53.11). Sin embargo, en la madrugada del sábado ni siquiera logró clasificarse para la final de 400 estilos y en la tarde del sábado tampoco había brillado en su clasificación para las dos finales que nadó la madrugada del domingo (200 estilos y 100 libres).

La primera de ella fueron los 200 estilos y Michael Phelps no se mostró cómodo en ningún momento. Lochte dominó la prueba durante los cuatro estilos y se impuso con gran autoridad parando el crono en 1:58.70, seguido del también oro olímpico Conor Dwyer (1:59.40) y de un Phelps que ni siquiera logró bajar de los dos minutos para acabar tercero (2:00.01).

Por tanto, después de dos decepciones faltaba la prueba reina, los 100 metros del estilo más rápido, el libre. Y una vez más Phelps logró una sensacional proeza. Al paso por el 50, en el viraje cerraba la prueba en octava posición, pero emergió como un 'Ave Fénix' para superar uno tras otro a todos sus rivales en las instalaciones del Skyline Aquatic Center de Mesa y acreditar 49.72, tan solo cinco centésimas menos que Lochte.

Y el de Maryland, de 29 años (cumplirá 30 el próximo 30 de junio) estaba eufórico. "Esta noche ha sido la mejor que he tenido en esta piscina desde que estuve aquí mismo hace un año. Sentí esa punta de velocidad que no había sentido antes y eso me llena de satisfacción, porque creo que es un gran punto de partida". Antes, el estadounidense había recalcado las buenas sensaciones que tuvo el día de su debut cuando ganó los 100 mariposa y volvió a reiterar que no estará en los Mundiales que se disputarán en agosto en la localidad rusa de Kazán.

De hecho, Michael Phelps está fuera del equipo de Estados Unidos para la cita mundialista en una decisión tomada cuando fue condenado por conducir bajo los efectos del alcohol. Sin embargo, en Mesa se han sucedido los acercamientos y la propia Federación Internacional de Natación ya ha dejado caer que podrían concederle una 'wild card' especial por tratarse "del mejor nadador de toda la historia". Incluso la Federación de su país también ha dejado la puerta entreabierta... pero ahora es el propio nadador el que descarta esta posibilidad y parece decidido a centrar todos sus esfuerzos en preparar a conciencia los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.

De cualquier forma, la mejor noticia para la natación y para el deporte es que Michael Phelps está de vuelta y decidido a volver a ser el mismo. Le quedan 16 meses para la cita olímpica y, si no vuelve a cometer alguna de sus famosos actos de indisciplina, habrá que tenerlo muy en cuenta. Como al que más.