Un subcampeonato con mucho valor

Valentino Rossi: "Estoy mejor que nunca"

El italiano Valentino Rossi se ve con fuerzas de pelear por todo en 2015 tras un año en el que volvió a sentirse competitivo sobre el asfalto

El italiano se ve capaz de todo para 2015

El italiano se ve capaz de todo para 2015 / sport

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El subcampeonato ha rejuvenecido a Valentino Rossi, que se siente "más en forma que nunca" a sus 35 años. El nueve veces campeón del mundo de motociclismo así lo asegura este viernes al echar la vista y analizar un año en el que se ha reencontrado con su mejor versión sobre el asfalto.

"Es difícil valorarlo, pero para mí sí es mi mejor momento. Este año he trabajado en mil pequeños detalles. Soy más mayor que antes, pero me siento al 100%", explica un Rossi que otorga parte del mérito de su gran rendimiento a Marc Márquez y Jorge Lorenzo. "Mis rivales han cambiado y ahora son más jóvenes y más fuertes que en el pasado". 

No son los únicos cambios que se han producido a lo largo de los trece años que lleva Il Dottore en la categoría reina del motociclismo. "La moto ha cambiado, también las ruedas y la electrónica y, por supuesto, la manera de pilotar", señala un aplicado italiano. "Me gusta intentar mejorar, es parte del juego". 

Las victorias y, sobre todo, el sentirme competitivo de nuevo han devuelto al ilusión a un Rossi que a finales de 2013 se dio de margen seis carreras para decidir su futuro más allá de 2014. "Feliz y orgulloso de lo conseguido" es la respuesta de alguien con grandes objetivos para 2015. "Ha sido una muy buena temporada porque he sido capaz de mejorar mi velocidad y mis rendimientos comparado con los últimos años", comenta el piloto de Yamaha. "He disfrutado mucho en muchas carreras". 

Y no a cualquier precio. Antes de vivir un gran año, Valentino Rossi se vio obligado a tomar algunas decisiones dolorosas. Entre ellas, la de prescindir de Jeremy Burgess, su inseparable hombre de confianza desde los tiempos de HRC. Tras años de trabajo en común, el italiano decidió cambiar de ingeniero y acertó. Silvano Galbusera se puso al mando de su equipo y rejuveneció la manera de trabajar de los hombres de Rossi.

"Fue muy difícil tomar la decisión por la relación personal que nos une, pero fue una decisión valiente de la que estaba seguro. Todos los equipos y los ingenieros dedican mucho tiempo a hablar con el piloto, pero después dedican mucho más tiempo al análisis de datos para modificar las configuraciones", relata un Rossi que deja entrever los obsoletos métodos con los que trabajaba con Burgess.