Juegos Olímpicos: Tenis de Mesa

Inventado en el siglo XIX por la clase alta de Inglaterra como entretenimiento tras las cenas, el tenis de mesa fue mejorando sus reglas hasta la creación de la Federación Internacional de Tenis de Mesa en 1926. El deporte ingresó en el programa Olímpico en los Juegos de Seúl 1988.

En la actualidad se compite tanto a nivel individual como en equipo -desde Pekín 2008, cuando se decidió sustituir los dobles por la categoría de equipos-.  En esta última modalidad la victoria se consigue al mejor de cinco partidos, de los que cuatro son enfrentamientos individuales y uno es un doble. El sistema de puntuación de cada duelo es al mejor de siete sets en los que se juegan 11 puntos. Para vencer, además, es necesario sumar dos puntos de ventaja sobre el rival.

El saque cambia de equipo a cada dos puntos, o a cada punto cuando el marcador está empatado en 10 a 10.

Para reducir la velocidad de los partidos y tornarlos más atractivo para el público, la pelota ha aumentado de tamaño, de 38 mm a 40 mm de diámetro.

Los asiáticos son los reyes de este deporte. De hecho, de las 28 medallas de oro disputadas en toda la historia del deporte en los Juegos Olímpicos, 24 fueron para China.