La entrevista

Santi Millán: "La vida es más hermosa con sentido del humor"

Santi Millán acaba de regresar de participar en la Titan Tropic Cuba by GAES y lo explica en su programa ‘Imparables’. Deportista tardío, actor consagrado. 

Toni Frieros

¿Qué queda de aquel mozalbete de 20 años que triunfó en el teatro con La Cubana?

Han pasado muchos años y me siento igual… aunque luego te miras al espejo y dices: “No, no es lo mismo”. Mantengo la ilusión y las ganas de entonces, si bien con menos inocencia.

Has triunfado…

Pero también he pasado momentos malos. Cuando un proyecto no funciona te sabe mal y has de asumir tu parte de responsabilidad y aprender de tus errores.

¿Qué significó trabajar con Andreu Buenafuente?

Dejé La Cubana y me tuve que buscar la vida. Un guionista de La Cubana empezó a trabajar con Buenafuente. Me llamaron, pero no quería hacer entretenimiento. Me fui a Madrid a hacer castings. No me cogió nadie, así que regresé a Barcelona y le dije a Andreu: “Qué, ¿cuándo empezamos?”. Nos entendimos siempre muy bien.

Usted no solamente usa el humor como herramienta de trabajo. Es así...

Es cierto, yo intento tomarme la vida con filosofía y con humor. Es decir, que no utilizo el sentido del humor exclusivamente para trabajar, sino como forma de vida. Las cosas van mucho mejor con sentido del humor.

Relativizando…

Siempre… A veces el Santi que conoce la gente es un poco el personaje.

Ha hecho cine, teatro, televisión. ¿Cuál le va como anillo al dedo?

Con lo que mejor me lo paso es con el teatro.

Como la vida, en directo…

De joven tenía la ilusión de triunfar haciendo teatro. Nunca pensé en hacer cine o televisión. Pero claro, después de diez años haciendo bolos acabé algo saturado y con ganas de cambiar. Pero lo mío es pisar el escenario, el contacto con la gente. 

¡Está triunfando con ‘El Chiringuito de Pepe’!

Ha sido un regalo. Los éxitos siempre sorprenden, porque nunca sabes lo que va a pasar. La primera temporada fue un ‘boom’, el estreno más visto en Tele 5 desde 2005.

¿Y cómo se enganchó del deporte, digamos, extremo?

Por casualidad. Llegué muy tarde, hace solo seis años.

¿Cómo empezó?

Mi primera carrera de bici de montaña fue la Selénika de Igualada. Y allí conocí a Antonio Gassó, de GAES. “¿Tú eres Santi Millán?”, Si, yo soy, le dije. Y me preguntó si me apetecería participar en la Titan Desert. No sabía ni lo que era, pero le contesté que sí.

¡En menudo líos se mete!

Me planteé entrenar de forma contínua. Participé con el equipo de GAES en 2012 y acabé la prueba cuando nadie daba un duro por mí.

¿Qué te aportan estas pruebas, qué buscas?

Ni fama, ni dinero, ni reconocimiento… A veces me digo, ¿por qué lo hago? Lo hago porque es sacrificio, esfuerzo, compañerismo, constancia, valores que luego aplico a la vida y me van muy bien. Sobre todo mentalmente, porque he tenido que superar momentos muy difíciles y duros, sobre todo en la Cape Town.

¡Acaba de llegar de Cuba!

Sí, la Titan Tropic by GAES ¡Qué gran experiencia! Era la primera edición así que fue una gran sensación de ser pionero. Paisajes bellísimos, mucho barro eso sí, condiciones duras, pero muy gratificante, como se puede ver en el programa ‘Imparables’.

¿El próximo reto?

La EPIC de Atacama, en Chile, en septiembre. El problema será la altitud. A ver como sale…

¿Entrena cada día?

Cada semana, pero supeditado a la familia y al trabajo.