Juegos Olímpicos

Japón descarta su logotipo para Tokio 2020 tras las acusaciones de plagio

Japón ha decidido retirar el polémico logotipo diseñado para los Juegos de Tokio 2020 tras las acusaciones de plagio contra su creador, Kenjiro Sano

El logo de Kenjirio Sano para Tokio y el del teatro de Lieja

El logo de Kenjirio Sano para Tokio y el del teatro de Lieja / sport

Sport.es

El comité organizador de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 ha anunciado, conjuntamente con el gobierno de Japón, su decisión de descartar el logo olímpico ante las acusaciones de plagio. 

El ministro nipón para los Juegos, Toshiaki Endo, en declaraciones recogidas por la agencia local Kyodo, ha justificado esta opción después de que así lo solicitara el diseñador del logo, Kenjiro Sano

El Gobernador de Tokio, Yoichi Masuzoe, afirmó que se sentía "traicionado" por el supuesto plagio del emblema olímpico.

El logotipo olímpico oficial de Tokio 2020 del diseñador Kenjiro Sano ha estado rodeado de polémica desde que a finales de julio el belga Olivier Debie afirmase que se trataba de un plagio de una obra suya a los pocos días de su presentación.

Debie considera que el logotipo nipón es demasiado similar al que creó para el Teatro de Lieja hace dos años, por lo que el pasado 10 de agosto interpuso una demanda por plagio ante la justicia belga.

Los organizadores han defendido hasta ahora el emblema realizado por Sano e incluso mostraron la semana pasada el boceto inicial con el fin de alejar las acusaciones del logotipo.

Sin embargo, la duda también cayó sobre el emblema olímpico por su parecido con otro realizado por el fallecido diseñador alemán Jan Tschichold.

Durante la reunión del ejecutivo japonés y el comité organizador este martes, Sano ha reconocido que había usado imágenes extraídas de internet para mostrar cómo quedaría el emblema olímpico al instalarlo en lugares públicos, aunque no admitió haber copiado los diseños de otros creadores, según recoge la cadena estatal NHK.

La polémica sobre el logotipo olímpico no es la única a la que ha tenido que hacer frente el Gobierno de Japón en relación a los Juegos de 2020.

El país asiático descartó en julio el proyecto original del nuevo estadio olímpico, diseñado por la arquitecta angloiraquí Zaha Hadid, tras las críticas recibidas debido a su magnitud y coste excesivo, que duplicó el presupuesto inicial, y juega ahora contra reloj para finalizar un nuevo proyecto para la sede central de Tokio 2020.