Un error ridículo que puede acabar con Florentino Pérez

El Madrid de Florentino Pérez podría haber cavado su tumba en un triste partido de Copa en Cádiz. Y no por un resultado adverso como el que se dio en el famoso alcorconazo sino por un error ridículo que demuestra el desaguisado en el que se ha convertido este club. La paliza que le dio el Barça sobre el césped encrespó a la afición blanca, pero su presidente supo capear el temporal prometiendo mejoras y resultados y denunciando una supuesta campaña en su contra. Y la mejor campaña la protagonizó ayer su delegado, Chendo, al comerse la sanción de un futbolista que provoca alineación indebida del equipo y expulsión inmediata de la competición. Es un error humano incomprensible en un mundo tan profesionalizado. Un desastre.

Da la sensación de que estas cosas solo le pueden pasar al Madrid. Y si quedan fuera de la Copa, si pierden la primera competición de la temporada y quizás la única que podían ganar, en los despachos, las responsabilidades no solo podrán quedarse en la dimisión o cese de Chendo. Irse de una competición de esta forma vergonzante es responsabilidad directa del presidente y, quiera o no, Florentino tendrá que dar un paso al frente...o al lado. Lo que no ha conseguido una debilitada oposición, ni los innumerables y sonados fracasos deportivos, lo ha podido lograr un simple empleado que descuidó las sanciones. Realmente es de película italiana cómica y surrealista.