FUTBOLEANDO

La difícil decisión de traer un complemento o un desatascador

No le vendría mal al Barça un delantero diferente para abrir defensas en momentos delicados

No le vendría mal al Barça un delantero diferente para abrir defensas en momentos delicados / sport

Lluís Miguelsanz

Queda el último, pero sin duda el más complicado. Fichar para el Barça no es fácil. Hay recursos, pero las incorporaciones deben ser impecables. Cualquier irregularidad, cualquier detalle negativo, cualquier despiste se magnífica hasta el punto de destrozar al jugador y ningunear el trabajo de la secretaría técnica. El altavoz mediático impone. Y más cuando se trata de firmar a un delantero, un tipo de futbolista que en el Barça suele estar mucho más a examen que cualquier otra posición. Están expuestos y, por ello, muchos no quieren venir.

Firmar a un goleador para sentarlo en el banquillo es aún más complicado. Los delanteros viven de rachas y, sin minutos, comienzan los problemas. Por ello, Robert debe convencer a los futuribles que en el Barça no es solo jugar sino participar de este proyecto único en el mundo. Porque solo entrenando con los Messi y compañía se aprende. Muchos vendrían con los ojos cerrados, pero el verdadero debate no es de convicción sino de posición. El Barça debe decidir si busca un ‘nueve’ tipo Suárez o uno clásico. Porque, tal vez, no vendría mal un delantero diferente que desatasque partidos por su altura y contundencia. Un perfil de goleador salvador.