Victoria contra los elementos

CLAVE 1: Ni el frío ni los regalos al Madrid frenan al Barça

El Madrid no falló. Ganó (con ayuda arbitral, claro) donde el Barça había sufrido su única derrota de la temporada. La polémica victoria blanca en Getafe, con Pepe otra vez como lamentable protagonista, obligaba al equipo de Guardiola a lograr el triunfo en un Camp Nou helado, gélido. Y lo hizo. En esta Liga, en la que el Madrid perderá muy pocos puntos, cualquier tropiezo blaugrana significaría una sentencia definitiva. Pero, como dijo Pep, el Barça debe olvidarse de lo que haga el Madrid y centrarse solo en ganar todas y cada una de las 18 (17 ya) finales que le quedan. Porque no hay margen de error, porque la misión imposible de la remontada solo será posible si el Barça es perfecto, porque la ilusión del título pasa únicamente por sumar todos los puntos en juego. Porque, a diferencia del Madrid, al Barça no le regalarán nada. 

CLAVE 2: Las bajas obligan a Guardiola a jugar con 'niños'

Las circunstancias (rotaciones, lesiones, baja forma...) están marcando las últimas alineaciones de Guardiola, impensables a principio de temporada. Como la de anoche. Nadie hubiera imaginado que en el segundo partido de la segunda vuelta de la Liga serían titulares Jonathan Dos Santos, Thiago, Cuenca y Tello. Sin Xavi (obligado a descansar), sin Alexis (tocado), sin Iniesta, sin Villa y sin Pedro (lesionados), el técnico no tuvo más remedio que apostar por los chavales. Una demostración obligada de que cree en ellos. Ya lo dejó claro al no fichar ningún refuerzo en el mercado de invierno. Y volvió a evidenciarlo anoche, dándoles la responsabilidad en un partido que el Barça tenía que ganar sí o sí. Los `niños¿ cumplieron. Incluso Tello abrió el camino de la victoria con su primer gol. Hay futuro. Pero todavía no son presente.

CLAVE 3: Messi recupera tímidamente su sonrisa con un gol

Messi llevaba tres partidos sin marcar un gol. Su peor racha. Anoche había tenido dos oportunidades clarísimas para romper el `maleficio¿ que le perseguía en los últimos encuentros. Pero falló. Como falló el penalti en Valencia. ¿Preocupación? No. La `peor¿ versión de Messi continúa siendo imprescindible para el Barça. Estamos tan mal acostumbrados que una baja forma transitoria de Messi provoca alarma. Al crack argentino le falta recuperar sensaciones en el campo. La sobredosis de fútbol que acumulan sus piernas (y su cabeza) le está pasando factura. Pero a Messi lo único que le interesa en esta vida es jugar con el balón. Por eso Guardiola no le da descanso. Acertadamente. Porque en el minuto 73, Messi recuperó su sonrisa. Tímidamente. Con un golazo de estrella. Messi está volviendo.